Melissa McCracken, una artista de 26 años de Kansas City, Missouri, padece un fenómeno neurológico poco frecuente que afecta aproximadamente al 4% de la población por el cual mezcla la respuesta del cerebro a ciertos estímulos.
Melissa McCracken
La sinestesia afecta de diferente forma a distintas personas, pero en el caso de Melissa, de manera espontánea e involuntaria ve colores cuando escucha música. Para ella, cada letra y cada número es de color. Lo más maravilloso de ello es que puede ver la música que escucha: es una mezcla de colores, texturas y movimientos.
Melissa McCracken
Hasta que tuvo 16 años pensó que su sinestesia era completamente normal. Descubrió que no era así cuando le dijo a un amigo que iba a ponerle a su móvil azul un tono de llamada "naranja" porque eran colores complementarios. Fue impactante para ella, ya que hasta ese momento no había pensado que fuese inusual.
Melissa McCracken
Siempre le había gustado pintar, especialmente pintura abstracta. Empezó pintando recuerdos de tiempos notables de su vida, y estos estaban relacionados con ciertas canciones. Y como todo el mundo parecía interesado en su sinestesia, decidió que este fuera su tema central.
Melissa McCracken
En función a la música que escucha las pinturas varían. El funk por ejemplo es un estilo muy colorido, con un efecto muy saturado. La guitarras, por ejemplo, son generalmente de oro; sin embargo, el piano es más mármol.
Melissa McCracken
Aunque prácticamente siempre que escucha una misma canción ve los mismo colores, los resultados de las obras no son idénticos, ya que es imposible pintar exactamente de la misma forma dos veces. Además, no todos los sinestésicos ven los mismos colores en las mismas canciones, por lo que son muy subjetivos.
Melissa McCracken
No sólo pinta canciones, en algunas ocasiones simplemente sonidos; aunque estos son menos chocantes, una rápida ráfaga de color que rápidamente desaparece.
Hasta hace poco tiempo la sinestesia era un fenómeno realmente extraño y muy poco conocido; sin embargo, recientemente famosos como Kanye West o Lady Gaga han hablado sobre ella. Cada día son más casos los que se conocen, y aunque se trata de un fenómeno neurológico, no tiene porque tratarse como algo negativo.