La amistad es algo que solemos dar por sentado y lo disfrutamos sin darle el valor que se merece, pero, ¿qué pasaría si te quedaras sin amigos? ¿Serías capaz de evadirte de los problemas o estos te llevarían a caer en una depresión?

Estas y muchas otras preguntas se tratan en la película de animación "Mary and Max" de Adam Elliot. La imperfección y las Amistades

Esta película narra la historia de una amistad que se forja a través de correspondencia entre dos seres opuestos físicamente pero que conectan a través de sus sentimientos de soledad. En un lado se encuentra una niña de 8 años, Mary, que vive en Melbourne, y por el otro Max, un hombre con obesidad mórbida que vive en Nueva York.

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Melanie Coombs

Mary Daisy Dinkle es una niña con una duda que necesita resolver, ¿de dónde vienen los bebés en América? Vive con sus padre, un taxidermista que no repara mucho en su hija y una madre cleptómana y alcohólica a la que tampoco le puede plantear sus dudas. En una visita a correos coge la dirección de Max de una guía de teléfonos de Nueva York y le escribe para aclarar sus dudas.

¿Qué se necesita para forjar una buena amistad?

Esta película de animación trata otros temas a parte de la amistad: depresión, soledad, prejuicios, bullying y suicidio quedan retratados en esta producción de Stop Motion con unas tonalidades predominantemente oscuras para expresar la frialdad del mundo de Max que solo se ve inundado de color por los objetos que Mary le envía.

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Después de pasarte 20 años hablando con una persona por correspondencia pero sin haberla visto nunca, ¿se puede considerar que es tu amigo? ¿Qué límites tiene la amistad?