Al Capone pasará a la historia como uno de los mafiosos más famosos de todos los tiempos. A pesar de las innumerables representaciones de la gran pantalla, poco se sabe de los últimos años de su vida.
Sus últimos años no solo describen un hombre impotente y derrotado, sino una visión intima de su paso en Alcatraz.
A continuación te dejamos los diez hechos más fascinantes de los últimos años de la vida de Al Capone.
1- La orquesta convicta.
Durante su estancia en la cárcel de Alcatraz, se le concedió el permiso de adquirir instrumentos musicales si se unían a la orquesta. Al Capone, que no tenía ni idea de música, compró varios instrumentos y se unió a la orquesta.
Los otros delincuentes lo despreciaban ya que creían que intentaba tomar el control de la orquesta. Esto dio lugar a disputas constantes y a su segunda pelea en la cárcel.
2- La tortura y los privilegios especiales.
En Alcatraz, los presos eran sometidos a una dura disciplina a manos de guardias. Esto incluía palizas, pasar hambre y ser arrojado al calabozo. Gracias a su enfermedad, Al Capone fue el único prisionero que no recibió dicho tratamiento. En su lugar se le concedieron privilegios especiales debido a su influencia política.
3- Demandas.
En julio de 1938, se publicó un informe que documenta la declinación de Al Capone, destacando que estaba en un sueño continuo, que no era violento y que ya no necesitaba una camisa de fuerza.
Para la ciudad de Miami no fue suficiente. Lo denunciaron por temor a la violencia y la corrupción y pensaban que era una amenaza para la seguridad y el bienestar de los residentes.
4- Capone vs Lucas.
James Tex Lucas era un criminal en todos los sentidos, provocando el caos durante toda su vida. En 1935, sus terribles acciones lo llevaron a Alcatraz.
A pesar de todos sus antecedentes penales, Lucas siempre será conocido como el hombre que casi le quitó la vida a Al Capone. Se encontraron en el cuarto de baño y Lucas uso las tijeras para atacarle. Sufrió muchas heridas pero Al Capone sobrevivió. A pesar de que Lucas había sido condenado a cadena perpetua por asesinato, el sistema judicial lo puso en libertad condicional.
5- El entorno de Al Capone en el hospital.
Después de su liberación de Alcatraz, Al Capone buscó tratamiento en el hospital Union Memorial, en Baltimore. A su llegada, Al Capone ocupó toda la quinta planta del hospital. Trajo a todo un séquito formado por guardaespaldas, un masajista, su barbero, numerosos miembros de la familia y un probador de comida para asegurarse de que no estuviese envenenada.
Para mostrar su agradecimiento al hospital, donó dos cerezos japoneses llorones, uno de ellos aún sigue en pie delante de la entrada del hospital casi 80 años después.
6- Lujo extremo.
De los últimos años de Al Capone circulan muchos rumores. Uno de ellos era que tenía una piscina con peces para pasar el tiempo pescando, pero dicho rumor es falso e imposible porque estaba en la ruina.
El hombre que había ganado 40 millones de dólares al año, se esforzó por mantener a su familia con un ingreso de 600 dólares a la semana que le proporcionaban sus antiguos socios de Chicago. Ya no vivía una vida de lujo.
7- Trastornos mentales.
Al Capone era un notorio mujeriego, incluso estando casado, lo que le llevó a contraer sífilis. No se sometió a tratamiento y se la transmitió a su esposa. Con el tiempo, la enfermedad deterioró su estado mental. En la prisión se dieron cuenta de su deterioro así como de sus arrebatos violentos.
8- Abstinencia de cocaína.
Aparte de la enfermedad venérea, Al Capone era un adicto a la cocaína. Su dependencia y abuso de la cocaína fue tan grave que se había destruido el tabique nasal. El médico de la prisión atribuyó erróneamente esto a la sífilis. No fue hasta casi 60 años después cuando un doctor examinó las placas de rayos X de Capone y descubrió que no se mostraba evidencia de la enfermedad en las fosas nasales.
9- Penicilina.
A principios de la década de 1940, Al Capone tenía sobrepeso y carecía de coordinación mental y física, además sufrió varios brotes de epilepsia. A menudo caminaba rápido, silbando y tarareando mientras hablaba con seres imaginarios.
Aunque la penicilina no salió al mercado hasta 1942, su médico pudo conseguirla, y curiosamente, Al Capone se convirtió en uno de los primeros pacientes de sífilis en la historia de la medicina que fue tratado con antibiótico.
10- Disposiciones finales.
Al Capone murió el 25 de enero de 1947. Para evitar un espectáculo público, el cuerpo de Al Capone fue transportado en secreto desde la finca de la familia hasta Chicago. Esa tarde, el hijo de Al Capone anunció a la prensa el fallecimiento. Un coche fúnebre llegó para recoger un ataúd vacío. Y los allí presentes asistieron a un falso funeral.
Poco tiempo después, la familia se fue a Chicago en tren para darle una misa en la Catedral del Santo Nombre y enterrarlo en el cementerio Monte de los Olivos el 1 de febrero, tres días antes de lo programado.
Sin embargo este no sería el lugar de descanso final de Al Capone. Tras la muerte de su madre en 1952, su féretro fue trasladado al cementerio de Monte Carmelo, donde permanece en la actualidad.