Los centros de acogida, así como las perreras y las protectoras de animales normalmente están saturados y no dan abasto con todo el trabajo que tienen. El mayor problema de estas instalaciones es el espacio, siempre están por encima de sus capacidades y esto conlleva muchos problemas.
Hay demasiados animales abandonados y muy pocos hogares para acogerlos. Este fue el problema al que se enfrentó Angus, nuestro protagonista de hoy, que entró en un centro de acogida después de haber sido atacado por otro perro.
La refugio estaba por encima de su capacidad, y Angus, junto con 150 perros más iban a ser sacrificados en 3 días.
Los activistas locales se pusieron manos a la obra.
Instaron al alcalde a darle un par de semanas de plazo para poder encontrar familias para estos pobres animales.
No había tiempo que perder, los animales debían encontrar un hogar, y alguno de ellos estaban en malas condiciones de salud.
Anne-Marie Dimi Marcu realizó fotografías de los animales que estaban en peor estado de salud, y así es como conoció a Angus.
Angus perdió un ojo a causa de una infección mientras aún estaba en el refugio. Gracias al trabajo de Anne, 15 perros adultos y 11 cachorros lograron salir del refugio ya que encontraron familias que querían adoptarlos.
Angus no sabía que aún le esperaba un último viaje.
Su familia le esperaba en Escocia, y en cuanto se recuperó de todas sus heridas viajó allí para conocerlos.
Tuvo que esperar un tiempo, pero al final llegó a manos de su nueva dueña, Amanda. Angus aún está recuperándose de sus heridas, pero al menos ya está con alguien que le quiere.
¡Y va a vivir una larga y feliz vida!
Historias como ésta ocurren a diario, y a veces es un perro el que decide adoptar a un pequeño gatito, que encontró a su nueva madre en el lugar más inesperado.
Y recuerda: ¡la adopción siempre salva a un perrito de ser sacrificado!
¡Comparte esta bonita historia con todos tus amigos! Fuente: Heroviral