La idílica vida del canguro Jax en el desierto de Australia se hizo añicos cuando los cazadores mataron a su madre y lo secuestraron. Durante dos días, se lo mostraban a sus amigos como una especie de trofeo, a la vez que le privaban de poder comer y dormir.
Pero cometieron un error, uno que es bastante común en el mundo actual de las redes sociales: publicaron las imágenes de su "premio" en Facebook.
Y así es como Joslyn Van Nieuwkerk se enteró del peligro que corría Jax. Impresionada por lo que vio, Joslyn recogió las fotos como prueba de la negligencia que estaban cometiendo. Estaban maltratando y abusando de un animal.
Le enseñó las fotos a la policía, era todo lo que necesitaban para poder entrar en acción y arrebatarle el pobre canguro a estos maltratados.
"Cuando llegamos, llevaba sin comer 48 horas, estaba muy frío y en muy mal estado. Pesaba poco más de un kilo", dijo Joslyn. También señaló que estaba muy deshidratado.
Estaba aterrorizado y traumatizado después de perder a su madre y de haber sido tratado tan mal.
Pero con dulzura y paciencia, Joslyn y los equipos de rescate consiguieron que fuese cogiendo fuerzas y confianza.
"Ha sido cuidado con mucho amor", dijo Joslyn. "Se está haciendo más fuerte cada día".
Aún así, Jax todavía tiene un largo camino por recorrer antes de que pueda ser liberado de nuevo en su hábitat natural.
Hasta entonces, se quedará en el centro de rehabilitación recibiendo amor y todos los cuidados que necesita.
Lugares como el Kangaroo Sanctuary Alice Springs se especializan en la cría y el cuidado de los canguros que han sido heridos para ser devolverlos posteriormente a su hábitat natural sanos y salvos.
¡Menos mal que cometieron ese gran fallo y que Joslyn se topó con esas fotos!
¡Comparte este gran rescate con todos tus amigos! Fuente: Little Things