A ninguno de nosotros nos gustaría ver a nuestra mascota sufrir por alguna emergencia médica, pero por desgracia, esas situaciones ocurren y normalmente no estamos entrenados para afrontarlas correctamente. Saber como reaccionar de forma adecuada puede suponer la diferencia entre la vida o la muerte
A continuación te mostraremos cómo realizar una Reanimación Cardiopulmonar y la Maniobra de Heimlich a tu mascota. No dudes en preguntar a tu veterinario cualquier duda que tengas al respecto.
Asistencia médica
En primer lugar, pide asistencia médica por teléfono tan pronto como veas que tu perro puede estar en una situación de peligro, los veterinarios podrán ayudarte a reconocer los síntomas que presenta tu perro además de proporcionarte consejos que te serán de utilidad.
Para estar preparado frente a una emergencia y poder actuar con rapidez, es muy aconsejable que tengas siempre el número de teléfono de tu veterinario a mano.
En algunas de estas terribles situaciones de emergencia, tu mascota podría sufrir una insuficiencia respiratoria, o alguna parada cardíaca, ¿no te gustaría saber como ayudar a tu compañero en esa situación?
¿Cómo realizar una Reanimación Cardiopulmonar a tu mascota? Existen 4 pasos básicos a seguir:
1- Evaluar la situación de tu perro.
2- Conseguir una vía de entrada de aire.
3- Realizar el boca a boca.
4- Realizar el masaje cardíaco.
1- Comprueba la situación de tu mascota.
Lo primero que debes de hacer es comprobar si tu perro respira. Para comprobarlo, coloca tu mano en su hocico intentando sentir el flujo del aire que provoca su respiración.
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En segundo lugar, comprueba su pulso colocando tu oído sobre su corazón, este se encuentra en el lado izquierdo de su pecho, cerca de la zona donde se une la pata con el hombro. Otro lugar donde puedes tomarle el pulso con facilidad se encuentra en la parte interna del muslo, donde se encuentra la arteria femoral. Para localizarla pasa la mano por el interior de la pata trasera hasta que esté casi en el punto donde la pata se une con el cuerpo.
valheart 2- Entrada de aire
Si tu perro no respira y no tiene pulso, el segundo paso para realizar el RCP es crear una vía de entrada de aire. Para comprobar que el aire le llega a los pulmones.
1) Endereza la traquea girando su cabeza para que esté en línea con su cuello. Ten cuidado de no provocarle traumas en el cuello realizando elongaciones demasiado grandes.
2) Cierra la boca de tu mascota procurando que no se escape el aire cuando exhales y sopla directamente en su hocico hasta que su pecho se hinche. Si el pecho no se le hincha, debe de haber algo en su que está obstruyendo la entrada de aire.
3) Examina su boca en busca de algún cuerpo extraño que pueda estar impidiendo la entrada de aire y retíralo.
4) Si la vía respiratoria sigue cerrada, prueba a realizar la técnica de Heimlich (mostrada en los siguientes pasos).
5) Sostén a tu mascota con la cabeza hacia abajo y con la espalda hacia tu pecho.
6) Presiona su abdomen con ambos brazos. Hazlo varias veces de manera rápida e intensa.
8) Después de 5 intentos, para y examina si el cuerpo extraño es ahora visible desde su garganta. Si es así, retíralo y haz dos respiraciones de rescate insuflándole aire directamente a través de su hocico. Si el aire no entra, repite la técnica Heimlich hasta conseguir la entrada de aire.
3- Boca a boca
1) Después de conseguir una vía de entrada de aire adecuada realiza la reanimación pulmonar. Para ello, cierra la boca de tu mascota y sopla directamente en su nariz hasta que su pecho se hinche. Si el pecho no se le hincha, vuelve a realizar el Paso 2.
2) Realiza 15 respiraciones por minuto. Una respiración cada 4 segundos.
4- Masaje Cardíaco
1) Con cuidado, tumba a tu mascota sobre su lado derecho.
2) Coloca ambas manos sobre su corazón, lo encontrarás en la parte baja del lado izquierdo de su pecho.
3) Comprime el pecho 15 veces y seguidamente realiza 2 respiraciones de rescate. Realiza las 15 compresiones durante 10 segundos ejerciendo una presión que comprima el pecho más o menos un cuarto de su ancho.
5) Realiza el masaje de rescate cardíaco hasta que notes que tiene pulso y respira regularmente.
Pregunta a tu veterinario cualquier duda que tengas y recuerda que estar preparado para estas situaciones de emergencia puede marcar la diferencia en la salud del mejor amigo del hombre. ¡Compártelo con todos tus amigos y haz la vida de sus mascotas un poco más segura! ?
