El otro día mi cuña se presentó en mi casa con muy mal aspecto y me rogó que no le dijese a mi hermano que se encontraba conmigo.

Hace algunos días, mi cuñada vino a mi casa con un aspecto absolutamente demacrado. Cuando le pregunté qué es lo que había ocurrido, me dirigió una mirada desesperada y me pidió que esperase a que los niños se fuesen a la cama para poder conversar más calmada. Sus hijos, de 6 y 3 años, estaban muy nerviosos al haberlos sacado de la cama para poder traerlos hasta aquí, así que les ofrecí un poco de helado y les puse una película de dibujos para que se tranquilizasen y se durmiesen.

Minutos después mi hermano llamó al teléfono y yo lo ignoré aunque me doliese hacerlo. Realmente no estamos muy unidos pero hemos crecido juntos en una casa que era un infierno y pasamos muchas dificultades como para ignorarlo cuando sé que tiene un problema. Él es mi única familia y no me gustaría perderlo

noticias.universia.es

La realidad era que mi cuñada parecía totalmente aterrorizada. Apenas la conozco pero en el instante en que me miró pude comprobar que tenía los labios reventados. Estaba seguro de que mi hermano no había sido (simplemente porque mi padre lo hizo con mi madre y él conoce las horribles consecuencias de los malos tratos).

Al día siguiente quedé con mi hermano. Le había llamado por la mañana para programar un almuerzo con la excusa de que hacía mucho tiempo que no nos veíamos y teníamos muchas cosas de las que me gustaría hablar.

Cuando se presentó, rápidamente me vino un olor fortísimo a alcohol, poco después me confesó que no se había duchado ni había ido al trabajo aquel día. Me dijo que no sabía donde estaba su familia y que eso lo estaba volviendo loco.

Yo le pregunté qué es lo que ocurrió antes de que ella se marchase y él me dijo que tuvieron una pelea porque ella es demasiado tierna con los niños y no les enseña disciplina, Luego me dijo que se gritaron durante un rato hasta que él se marchó para tranquilizarse un poco y que cuando volvió a casa su mujer había desaparecido con los niños.

mauricioleandro.wordpress.com

Casi asustado le pregunté si él llegó a golpearla, (me sentí muy mal en aquella situación, después de todo era mi hermano y le quería ayudar). Me quede totalmente en shock cuando me respondió: No muy fuerte, otras veces le he golpeado más duro, aunque no era algo de lo que se sintiese orgulloso. Se defendía diciendo que él no quería hacerlo pero que ella lo enfurecía demasiado.

Totalmente sorprendido le dije que no podía golpear a su esposa sin más y que tenía que dejar inmediatamente de beber. Entre lamentos me él me contestó que lo había intentado otras veces pero que era lo único que le ayudaba a relajarse y a disfrutar de la vida. Yo le recordé que tenía a un par de hijos maravillosos con los que podía divertirse (siendo honestos, lo único bueno de todo este lío es que he podido conocer a mis sobrinos mucho mejor). Le dije que buscar ayuda en algún centro para dejar su adicción ayudaría a que su esposa decidiese volver a casa, por lo que se comprometió en buscar ayuda en cuanto pudiese para solucionar su problema de alcoholismo.

Tomé algunas imágenes de los moretones que tenía la mujer cuando llegué a casa y le dije que estaba muy decepcionado con todo lo que había pasado, que lo sentía mucho y que había conseguido que él buscase ayuda para solucionar su problema

Desafortunadamente, esa misma noche ella le mandó este mensaje sin que yo lo supiese.

"Solo quiero que sepas que Chase y Alex te quieren y te echan de menos. Estamos bien. Espero que  estés buscando un centro de desintoxicación de verdad."

lacronicadesalamanca.com

Con aquel mensaje, él inmediatamente se dio cuenta de que ella estaba en mi casa por lo que se presentó en mi puerta unas horas después totalmente borracho y furioso. Aunque traté de calmarlo, comenzó a tirar de su esposa y del niño que ella tenía en brazos mientras le gritaba a su hijo mayor para que los siguiera. Obviamente no dejé que se llevara a su pobre esposa de vuelta a casa en aquel estado.

Al final terminamos a golpes porque él no atendía a razones y se estaba poniendo demasiado agresivo. Le dije a mi cuñada que llamase a la policía pero no me hizo caso, en cambio, mi sobrino sí (no sé si estar orgulloso por que lo hiciese o sentir pena por que lo tuviese que hacer).

Cuando llegaron los agentes de policía arrestaron a mi hermano y lo llevaron a la cárcel. Les mostré las fotos que había tomado y al final terminó todo en un desastre.

Comparte esta historia si crees que este chico actuó de forma correcta con su hermano para proteger a su cuñada.

Fuente: Hrtwarming