La menstruación produce muchos cambios en el funcionamiento del organismo de una mujer. No solamente produce dolor en la zona del vientre, sino que también causa otros muchos síntomas, a menudo desconocidos, como por ejemplo la sensación de hambre.
El Dr. S. Zev Williams, profesor asociado de obstetricia y ginecología y jefe de endocrinología reproductiva e infertilidad en la Universidad de Columbia asegura que: "Las mujeres han sabido durante siglos que había un vínculo entre el apetito y el ciclo menstrual y, por suerte, estudios recientes lo han confirmado."
A lo largo del ciclo menstrual, las hormonas como el estrógeno y la progesterona fluctúan. Esto afecta de manera directa al apetito. En primer lugar, el estrógeno tiende a hacer que disminuya, mientras que la progesterona puede hacer que aumente.
Durante la ovulación, el estrógeno está en aumento y la progesterona permanece baja. Justo antes de que comience el período menstrual, las cosas cambian, y los picos de progesterona provocan un hambre voraz.
Por otro lado, el metabolismo también cambia según la fase del ciclo menstrual en la que la mujer se encuentre, explica el Dr. Williams. La semana anterior a que comience con la regla, su cuerpo puede exigir entre 250 y 350 calorías adicionales para realizar las mismas tareas.
Los alimentos más beneficiosos para esta época del mes son los ricos en hierro. Al perder tanta sangre, podemos experimentar un poco de anemia, lo que puede ocasionarnos fatiga. Por lo tanto, los alimentos que contengan grandes cantidades de hierro serán nuestros grandes aliados.
Por lo tanto, la próxima vez que te venga la regla, no te sorprendas si de repente sientes hambre continuamente. Es una de las muchas consecuencias ocasionadas por nuestro ciclo menstrual.
¿A ti también te entra más hambre de lo normal cuando tienes la regla? ¡Cuéntanoslo en los comentarios! ¡Comparte este interesante artículo con todos tus amigos! Fuente: Refinery29