Para la mayoría de nosotros, ir a la playa resulta siempre una experiencia realmente divertida. No hay nada mejor que poder bañarse en el mar, con las olas rompiendo delante de ti, y con los rayos del sol sobre tu piel para conseguir el mejor bronceado.
Ahora que ya ha pasado el verano y llega el otoño, con más razón echamos de menos los días de verano en la playa. Pero resulta que los humanos no son los únicos seres vivos a los que les encanta la playa. ¡A los ciervos también les gusta!
En el vídeo que te traemos hoy, un bañista se topó con este pequeño ciervo que estaba perdido en la playa. Los ciervos, por normal general, no suelen abandonar su hábitat natural, por lo que es bastante sorprendente encontrárselos en un sitio diferente al bosque.
Probablemente, esta sea la primera vez que este ciervo vea el mar, y estará un poco sorprendido de ver una superficie tan extensa de agua; sin embargo, en cuanto ve que no hay ningún peligro, y que de las olas no hay nada que temer, este cervatillo sabe exactamente qué hacer: como cualquier niño haría, ¡el ciervo empieza a saltar sobre las olas y a corretear por la orilla!
¡Es una alegría ver a un ciervo divertirse tanto!
¡No olvides compartirlo con tus amigos y familiares!