Las ventas de champú se han desplomado en el último año, en parte debido al hecho de que cada día hay más mujeres que defienden la idea de que el uso del champú es inútil.
Hace 100 años el champú no existía, pero hoy en día no imaginamos nuestra rutina de belleza sin él. Antaño no existía la necesidad de lavarse el pelo con champú puesto que no existían tanto problemas capilares, de hecho, los problemas capilares como el picor o la grasa del cuero cabelludo han sido causados por las mismas empresas que prometen solucionarlos.
Los ingredientes que contienen la gran mayoría de este producto que se venden en supermercados y grandes superficies despojan al cabello de sus aceites naturales, dejándolo más débil y más vulnerable, tanto a los productos que les echamos como a la contaminación medioambiental.
Además, el hecho de que el champú elimine los aceites naturales del pelo provoca que el cuero cabelludo genere más y más para que el pelo no se quede desprotegido, lo que a la larga conlleva a que el cabello se vuelva graso y lo tengamos que lavar con otro champú especial para ese tipo de pelo.
Al final esto se convierte en un círculo vicioso que es muy beneficioso para la industria del champú, ya que cuanto más champú uses, más necesitarás usar y más ganarán ellos. Un amplio número de personas que se han dado cuenta de la situación, han decidido unirse en un mismo movimiento que lleva el nombre de "no-poo", lo que en español quiere decir "no al champú". Se están rebelando contra la aceptación generalizada del champú y se niegan a utilizarlo más. ¿El resultado? Un cabello suave, sedoso, sin encrespamiento y mucho más fácil de manejar.
Este movimiento comenzó en el Reino Unido, donde las ventas de champú se desplomaron el pasado año vendiendo unos 28 millones de euros menos que en 2015, según afirma en estudio reciente de Nielsen, una empresa de análisis de consumo.
Las mujeres cada vez utilizan el champú con menos frecuencia y los consumidores están optando por un cabello mucho más casual o natural, además, cada vez se conocen más productos o remedios para sustituir el champú como son los champús en seco, los naturales como los de Lush y el bicarbonato de sodio combinado con vinagre de sidra de manzana.
Marcas de champú como Pantene y Head & Shoulders (H&S) han visto disminuir sus ventas en un 7,9% y Herbal Essences ha caído un 14,6%.
Parece que este movimiento se está extendiendo por el mundo y está llegando a España. Con la cantidad de empresas de productos naturales que nacen cada día, el futuro de este tipo de marcas se ve muy negro y más aún si se niegan a dejar de fabricar productos repletos de químicos que maltraten el cabello de esa manera. Lo cierto es que lo natural siempre es mejor y en cuestiones capilares no podía ser menos. Y tú, ¿te vas a unir al movimiento?
