En la cocina suelen utilizarse una gran cantidad de utensilios y accesorios para conseguir preparar las comidas más ricas y sabrosas. Desde los más sencillos hasta los más sofisticados robots de cocina.
El papel de aluminio en concreto, suele ser algo que todos tenemos en casa. Es muy versátil, sencillo de usar y nos permite dejarlo todo limpio cuando cocinamos. Sin embargo, si lo utilizas habitualmente, hay algo que debes saber. ¡Es muy peligroso para la salud!
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El aluminio es metal pesado neurotóxico que ha estado siempre relacionado con el Alzheimer. La exposición a esta toxina puede conducir a la disminución de la coordinación, la memoria y el equilibrio.
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Este metal tóxico tiende a acumularse también en los huesos. Compite directamente con el calcio, y si empezamos a perder, calcio nuestros huesos se vuelven frágiles y se fracturan con facilidad.
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Inhalar aluminio puede causar problemas respiratorios, incluyendo fibrosis pulmonar. Por lo que si horneas alimentos en papel de aluminio, puedes dañar notablemente tus pulmones.
Pero, ¿de qué otra forma puede este metal pesado afectar a nuestro cuerpo? Beber un refresco de una lata o usar desodorantes con aluminio son algunas de las fuentes comunes en las que entramos en contacto con él.
Comer "trocitos" de aluminio
Obviamente nadie consume trozos de aluminio de forma consciente. Sin embargo, esto es lo que ocurre cuando cocinamos con este papel a altas temperaturas. El calor crea pequeñas grietas en el metal, que pueden romperse e ingerirse junto a la comida. Los trozos son tan pequeños que no te darás cuenta de que los estás consumiendo.
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Incluso si estos pequeños trozos de metal no se rompen, puede causar la lixiviación química del aluminio cuando se cocina con ciertas especias o con alimentos ácidos como los limones.
Según un investigador de ingeniería química de la Universidad americana de Sharjah, una comida puede lixiviar 400 mg de aluminio. Según la Organización Mundial de la Salud, el nivel máximo de seguridad de ingesta diaria no debe superar los 60 mg.
Aspirar metales
De hecho, ni siquiera es necesario consumir alimentos cocinados en papel de aluminio para inundarte de estas toxinas. Si te pones cerca de una parrilla donde se está cocinando sin cubrirte la nariz y la boca, corres el riesgo de inhalar pequeños trozos de aluminio.
Ya tenemos claro que este metal pesado es terriblemente peligroso para salud. Con esto en mente, hay algunas precauciones que puedes seguir para protegerte.
1- No cocines alimentos con papel de aluminio. Sólo se debe usar para almacenar alimentos fríos en la nevera.
2- No guardes especias, tomates o frutas cítricas en papel de aluminio. ¡Nunca! Los ácidos hacen que el aluminio se filtre en tu comida.
3- No utilices utensilios de cocina de aluminio. Intenta pasarte a las ollas y las sartenes de acero inoxidable lo antes posible.
4- Siempre que sea posible utiliza papel de horno en lugar de papel de aluminio.
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