Casi 9 de cada 10 personas han tenido un grano o una espinilla a lo largo de toda su vida. Prácticamente nadie se ha librado de ellos, sobre todo durante la adolescencia.
El acné es un problema tan común que existen numerosos tratamientos para reducirlo. Sin embargo, no todos los granitos son iguales, por lo que deben ser tratados de manera diferente.
Los 6 tipos de granos que existen y cómo tratarlos
El nombre que recibe cada tipo de grano y la forma de tratarlo depende de cómo se manifiesten, dónde aparezcan y si las bacterias entran o no en juego.
1- Miliums
Suelen salir en zonas donde hay poca secreción sebácea. Son blancos porque la grasa que los forman está queratinizada y no se pueden extraer drenando. Para eliminarlos debes acudir a un especialista para que te realice un microcorte con una lanceta.
2- Granos
Se producen por la infección e inflamación del conducto excretor que es perfectamente visible en la piel. Son de color rojo y pueden aparecer en cualquier parte del rostro. Dependiendo de su severidad pueden ser tratados mediante una rutina de higiene diaria con cremas espefíficas, antibióticos o tratamientos hormonales.
3- Quistes
Consisten en grasa queratinizada, blanca o amarilla que se acumula formando pequeños abultamientos. No están infectados, aunque en ocasiones se tratan con antibióticos. Los quistes sebáceos que no desaparecen por sí solos pueden requerir la intervención de un médico.
4- Espinillas
Son granos pequeños con puntita blanca. Están ligeramente infectadas y pueden tratarse con árbol de té, que es un antiséptico natural que puedes aplicar tópicamente. Este aceite ayuda a reducir la inflamación y el riesgo de cicatrices.
5- Punto negro
Se producen por la saturación de grasa en el conducto excretor que luego, con el contacto con el medio ambiente, la mala higiene o el uso de cosméticos incorrectos, se vuelve de color negro. La manera más eficaz de combatir los puntos negros es haciéndote una limpieza facial en una clínica estética y exfoliándote la piel semanalmente en casa.
6- Forúnculo
Es un grano muy grande, que contiene muchísima secreción sebácea y está bastante infectado. Es muy doloroso, pero no debes apretarlos. El proceso de drenaje debe ser ejecutado de forma aséptica para reducir el riesgo de la aparición de cicatrices y bacterias que penetren en la piel.
Si el drenaje no se realiza de forma correcta, puede producir nuevas infecciones en la piel, por lo que te recomendamos que acudas a un dermatólogo.