Si eres una mujer sabrás que en muchas ocasiones utilizamos la técnica de poner los ojos en blanco. Lo hacemos instintivamente y probablemente nunca te has preguntado el por qué. Pero la ciencia sí lo ha hecho y, después de una investigación, sugiere que las mujeres lo comenzaron a hacer como una estrategia evolutiva para afirmar nuestro dominio sobre otras mujeres.
Probablemente, te imaginabas que lo hacías como un mecanismo de defensa para esos chicos pesados que intentan ligar contigo o para librarte de alguna tarea, pero no es así.
Según un documento publicado en 2013 por la doctora Tracy Vaillancourt de la Universidad de Ottawa, la supervivencia de la mujer está directamente relacionada con la supervivencia de su descendencia.
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Las mujeres no suelen involucrarse en agresiones directas ya que intentan proteger su bienestar físico y continuar ahí para sus hijos. Por ello, las mujeres atacan de otras formas menos directas como criticar la apariencia de alguien, difundir rumores o poner los ojos en blanco.
Estos científicos evolucionistas creen que las agresiones indirectas han evolucionado, consiguiendo que las mujeres atraigan y aseguren a un compañero. Cuando la mujer está con su pareja y se encuentra con una clara rival, puede recalcar su puesto dominante con tan solo poner los ojos en blanco.
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Esta investigación también demostró que las mujeres son más sensibles que los hombres a los ojos en blanco, pudiendo activar su sistema de lucha. Es muy común ver este gesto en las niñas adolescentes. Lo usan para comunicar que un adulto ha cruzado la línea.
Aunque es bastante sorprendente saber que poner los ojos en blanco ha evolucionado hacia un deseo femenino de competir por la atención masculina, hay que reconocer que todas adoramos hacer este movimiento ocular. ¿No, chicas?