Emily Seilhamer, una mujer de Elisabethtown en Pennsylvania, es una experta en la reutilización de objetos para crear algo totalmente nuevo. Ha diseñado algún vestido muy bonito usando corbatas o papel pintado.
Pero esta vez el material ha sido más dulce. Emily ha estado guardando envoltorios de caramelos Starburst durante cuatro años, con ayuda de su familia, para crear un vestido precioso. Utilizó más de 10.000 envoltorios para este proyecto.
"Después de conseguir los envoltorios suficientes, los organicé por colores, los planché, los doblé e hice cadenas de envoltorios de caramelos," dijo Emily.
Cuando finalizó este paso, Emily utilizó hilo elástico para coser todos los envoltorios y crear una "tela". Esto le permitió hacer el vestido.
"Al pintar el elástico interior para que coincidiese con los colores de los envoltorios, conseguí también sellar los bordes e insertar una cremallera," comentó Emily.
Su motivación para crear este vestido es preciosa. Conoció a su marido cuando él le ofreció un paquete de caramelos Starburst antes de comenzar el proyecto. Por ello, los envoltorios de Starburst tenían un significado muy especial para ella. Los caramelos son su comida favorita por lo que guardó todos los envoltorios en bolsas.
El vestido era precioso y elegante, con bandas multicolores en el cuerpo y parte superior, lo que hace que tenga un escote muy atractivo.
En unas fotografías que realizó al terminar el proyecto, se ve como lleva un ramillete de envoltorios en la muñeca para que combine perfectamente con el vestido.
Los zapatos también van a juego y están hechos con envoltorios.
Definitivamente, es una forma muy innovadora de reciclar.
