Todo el mundo adora los cambios de imagen y si esto implica construir una casa en un espacio muy pequeño, con un diseño creativo y una solución ingeniosa aún más.
Michelle de la Vega es una artista y diseñador de Seattle que ha creado un pequeño y precioso refugio de 25 metros cuadrados en este garaje.
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Este pequeño garaje se encontraba abandonado y separado de otras construcciones. Estaba pidiendo un cambio a gritos. Por suerte apareció Michelle y el resultado es increíble.
A la construcción se le añade un espacio adicional que servirá como cuarto de baño. En el resto, se mantendrá la estructura original del garaje pero con otra estructura añadida para crear un altillo.
Tiene un acogedor y luminoso dormitorio en altura perfecto. Debe ser un lugar de ensueño los días de lluvia.
Con una cocina muy bien organizada y accesible, utilizando soluciones de almacenamiento abierto utilizando como cajones unas preciosas cajas antiguas.
En esta habitación se encuentra una chimenea rústica que llega a ser casi escultural, junto con las propias obras de arte de Michelle. Esta chimenea es el corazón de la casa.
Podemos encontrar cajas de vidrio que albergan unos papeles con forma de almohada.
Esto en realidad es un homenaje al padre de Michelle. Cada uno está cubierto con viejos planos arquitectónicos que le da un toque personal y nostálgico muy bonito.
El baño tiene un elegante diseño. Su simplicidad es calmante, sencillo y zen y es increíble que haya una bañera en esta casa tan pequeña.
También hay que señalar esta antigua taquilla. Encontrarle una nueva función a este objeto suma profundidad y personalidad a su hogar. También es una gran manera de reciclar.
Debemos destacar que Michelle se gastó 30.000 € en la reforma.
¿Cuántos de nosotros tenemos garajes que solo sirven para alojar objetos que al final acabamos tirando? ¿No te gustaría plantear una oficina, un estudio o una casa de invitados en él?