Este hombre intentó maltratar a su novia después de emborracharse, pero sus amigos pudieron impedirlo

La violencia de género es un problema más importante de lo que la mayoría de las personas puede llegar a pensar. Muchas parejas tienen una relación feliz y perfecta de cara a todos sus amigos y familiares pero lo cierto es que una vez llegan a casa todo cambia y se producen todo tipo de abusos y maltratos psicológicos o físicos, los dos igual de malos.

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Por ello es muy importante ayudar y tomar medidas si creemos que alguien cercano a nosotros está sufriendo este tipo de problemas. Carleigh Hager tiene 25 años y es de Indianapolis, Estados Unidos, y su vida cambió por completo cuando llegó a casa el pasado Octubre acompañada de su novio Ryan y de algunos amigos después de una boda.

La noche empezó bien pero tomó un rumbo inesperado cuando Ryan, que había estado bebiendo mucho durante todo el día, empezó a actuar de forma abusiva. Insultó a Carleigh frente a todos sus amigos, llegando incluso a sugerir que podían violarla si querían.

Carleigh se sintió tan mal que decidió que lo mejor era irse de allí para intentar calmar la situación por lo que se fue a la cama, pero eso no impidió que Ryan la siguiera y empezara a golpearla. Fue entonces cuando sus amigos intervinieron, pero Ryan consiguió echarlos de la casa y bloquear la puerta para que no entraran más. Pero llamaron a la policía y les contaron lo que estaba ocurriendo dentro de la casa.

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Cuando la policía llegó descubrió que Ryan había tirado a Carleigh al suelo y le había mordido 20 veces y casi había arrancado su lengua. Por suerte, le pararon antes de que pudiera infligir un daño irreversible. Trasladaron rápidamente a Carleigh al hospital donde pudieron volver a coser su lengua y curar las heridas, aunque estuvo 3 semanas antes de poder volver a comer. La heridas psicológicas tardaran mucho más en curarse.

Después de esto, Carleigh ha confesado que a pesar de que decía vivir felizmente con su novio siempre había tenido miedo de él y de como se comportaba, y ahora quiere advertir a otros para que no cometan el mismo error. 'Tienes que contárselo a alguien, no puedes avergonzarte de ello. Debes contarlo porque yo casi muero por no hacerlo y puede ocurrirle a cualquiera'.

Ryan se encuentra actualmente en la cárcel a la espera de un juicio por lo que Carleigh puede respirar tranquila sabiendo que se hará justicia.

Gracias a los amigos que llamaron a la policía, Carleigh está todavía viva; sin duda es una de las afortunadas pero hay otras chicas que no tendrán el mismo futuro. Esperamos que su historia ayude a algunas personas a abrir los ojos y contar lo que de verdad ocurre en sus vida.