Un granjero ruso encontró cuatro pequeños gatitos en su granero, o al menos eso era lo que parecían ser hasta que el hombre descubrió la verdad. Los pequeños necesitaban claramente su ayuda para sobrevivir. Sin embargo, parecían diferentes a los otros gatitos que el granjero había visto antes, y después de publicar unas imágenes en internet, alguien se dio cuenta de que cómo había sospechado, no se trataban de simples gatos.
Por lo tanto, para identificar qué tipo de atención que necesitaban, el hombre llamó a la reserva natural de Daursky, donde confirmaron que estos no eran gatos comunes. Eran animales conocidos como los gatos de Palla o Manuls, una especie rara de gato salvaje que es nativa de Asia Central.
De regreso a la reserva, el personal decidió comprobar si dos gatos comunes podrían amamantar a los recién nacidos. Afortunadamente, la idea fue un éxito y empezaron a tratarlos como si fueran suyos.
Después, tuvieron que decir adiós a estas criaturas adorables y llevarlos de vuelta a la naturaleza donde pertenecen. Desde entonces, se han acostumbrado a su entorno natural y llevan una vida normal.