Todos sabemos que cuando una gallina pone huevos, su instinto le lleva a sentarse sobre ellos para darles calor y protegerlos hasta que eclosionen. Una vez los pollitos nacen, la madre se asegura de que se coloquen todos juntos para seguir sentándose encima. Esto se debe a que los pequeños aún no tienen la capacidad de mantenerse calientes por sí mismos y necesitan a su madre.
Algunas gallinas no sólo lo hacen por esta razón sino porque también les gusta repartir amor y mostrar lo mucho que les importan sus pollitos. Esto les puede causar confusión y llevarles a querer ejercer la maternidad incluso con animales que no son sus pollitos. ¿No nos crees? Hace poco un granjero se encontró a una de sus gallinas empollando nada más y nada menos que a cuatro crías de gato en su corral.
[the_ad_placement id="social-sharing"]
Al parecer, la madre dio a luz en el corral seguramente porque se verían cómoda con los nidos de paja y sobre todo estaba a gusto en un lugar calentito. Cuando la gallina encontró a los pequeños decidió compartir su amor y empollarlos como si fueran sus crías.
Los gatitos no parecían tener problema con esto ya que estaban calientes, pero su madre no opinaba lo mismo ya que la gallina no la dejaba acercarse a ellos.
Durante tres días la situación fue tensa pero al final la gallina cedió y ahora comparte los deberes de madre con la gata y cuidan juntas a los pequeños.
Los gatitos no tienen ningún problema en compartir su amor con estas dos peculiares madres que hacen todo lo posible por mantenerlos a salvo; hasta la gata se ha mudado definitivamente al corral.
Estas historias, aunque sean animales, nos demuestran que existen todo tipo de relaciones y que no hay que juzgar ninguna de ellas por extraño que nos pueda parecer al resto.
¡No olvides compartir esta tierna historia con todos tus amigos! Fuente Reddit