Llegas a casa después de un día duro de trabajo, te pones ropa cómoda y te sientas en tu sofá con una serie preparado para terminar el día sin pensar en nada más. Solo te falta una vela para suavizar el ambiente y que todos tus sentidos se sientan como en casa.
Hasta ahora esta rutina era de lo más placentera hasta el momento de apagar la vela y ver el vaso lleno de marcas negras, la vela hundida por el centro o toda una llama cegadora que te distraía de la serie. Hoy os traemos unos consejos directamente extraídos de un vendedor de velas para sacarle el máximo provecho a tus velas.
Trucos para usar tu vela de la mejor forma posible
Recorta la mecha
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Este es el primer truco y el menos usado por todos. La mecha de la vela se debe recortar como si de tu pelo se tratase. Cuanto más larga la mecha mayor la llama y cuanto mayor la llama más rápido se consume la vela.
Manchas de humo
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La consecuencia de no mantener la mecha a raya es la aparición de manchas de humo en el recipiente de tu vela.
El tiempo lo es todo
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La mayor molestia para los amantes de las velas es encontrar que al ir a apagar la vela, esta se ha deformado por el centro o uno de los laterales, dejándola totalmente deformada y horrible.
Es todo cuestión de tiempo, si no dejas que la vela prenda el tiempo suficiente para que la cera se iguale.
Papel de plata al rescate
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Si has tenido que salir corriendo de casa y apagar tu vela antes de que los bordes se igualen con el centro, este remedio te ayudará a ponerle remedio. Coge un trozo de papel de plata y envuelve el recipiente de la vela con él.
El papel hará aumentar la temperatura del perímetro más rápidamente y de esta forma podrás conseguir que los bordes se derritan y tu vela vuelva a tener una superficie lisa.
Recicla tus velas
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No tires los recipientes de las velas una vez se hayan consumido son perfectos para usar de vasos, maceteros o como organizadores. Deja que tu creatividad fluya.
