El padre que no crees que existe se queda dormido con su hijo en el pecho después de estar meciéndolo durante lo que pareció una eternidad. Su esposa lleva al bebe de los brazos de su padre a la cuna y lo acuesta en la cama donde sólo duerme durante tres o cuatro horas. Se pasó la mayor parte del embarazo de su mujer hablando sobre el legado, y está decidido a crear uno.
Por eso, se levanta a las 3:30 de la mañana para tomar fotografías de la ciudad completamente vacía. Tiene que ir a trabajar a las 7 de la mañana y sabe que no va a tener la energía para perseguir sus sueños después de un deshumanizante turno de 12 horas.
El padre que no crees que existe no ha disfrutado de una ducha él solo en una semana. Últimamente ha estado combinando la hora del baño de su bebé, y su propia ducha para aprovechar al máximo ese recurso tan escaso del tiempo libre. Después, le gusta vestir a su hijo con paletas de colores que combinen con la suya.
El padre que no crees que existe quiere darle todo a su hijo, incluso las cosas que él no tiene, todavía. Quiere aprender a pescar para poder enseñarle a su hijo. Quiere llevárselo de acampada. Dice cosas como "tenemos que buscar actividades para estimular el desarrollo sensorial del bebé". Su mujer se contenta con dejar que su hijo golpee los muñecos.
El padre que no crees que existe ve una bonita puesta de sol e insiste en sacar una fotografía familiar junto al agua. Suele sacar un montón de fotos de todos juntos. Y todavía se lamenta del hecho de no haber tomado más. Pelea con su esposa para ver quién va a consolar al bebé cuando llora, y ha designado el domingo como el día familiar de la semana. Se niega a perderse las citas con el médico de su hijo, al igual que se negó a perderse las citas prenatales de su esposa. Sueña hasta con excursiones familiares. Planea mostrarle el mundo entero a su hijo.
El padre que no crees que existe no puede imaginarse ese día en el que su hijo no le dará infinitos mimos. Le deja que se agarre de sus rastas para poder levantarse. Desearía que su habitación fuese entera de almohadas para que su bebé nunca se pudiese caer al duro suelo.
El padre que no crees que existe es amable. Pensativo. Trabaja duro. Dedicado. Creativo. Con falta de sueño. Devoto. Inteligente. Presente. Dinámico. Adorable. Importante.
El padre que no crees que existe, en realidad sí que lo hace. Y no es un bicho raro.
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