Aunque ha habido mucho progreso en la medicina veterinaria durante el último siglo, una lesión en las patas puede ser una sentencia de muerte para algunos caballos. Por esto, cuando un caballo miniatura llamado Shine sufrió una horrible mordida en la pata por un perro violento, todo el mundo temía lo peor.
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Sus propietarias, Jacque Corsentino y Lee Vigil, supieron que algo estaba mal cuando Shine no los saludó una mañana en su rancho de Florencia, Colorado, como normalmente hacía. Cuando fueron a investigar, se encontraron con una escena bastante sangrienta y desagradable.
"Shine no vino a la puerta a verme como siempre hacía, y estaba de pie de forma sospechosa," recuerda su propietaria Jacque Corsentino. "Encendí la linterna y estaba cubierto de sangre."
Al mirarlo más de cerca, Jacque encontró múltiples heridas faciales, un labio roto y una pata que sangraba muchísimo. Por lo que pudo decir que el pobre Shine había sido atacado por un perro.
En este momento, las propietarias no estaban seguras de que pudiese sobrevivir.
Shine fue tratada primero por un veterinario de la zona, quien dijo que iba a vivir pero que su herida en la pata le afectaría para el resto de su vida.
Sus propietarias les llevaron al doctor Britt Stubblefield, un experto en heridas equinas, en el Servicio Veterinario Rocky Top. Aquí fue cuando descubrieron algunas noticias devastadoras.
En realidad, Shine tenía una fractura en el hueso de la paletilla inferior y en el hueso de la pezuña, que afectaría en la funcionalidad de su pezuña y su pata. Fue derivado a una doctora de la Universidad Estatal de Colorado llamada Dr. Laurie Goodrich, pero, desafortunadamente, tampoco tenía buenas noticias.
Necesitaban amputar la pata de Shine entera, lo que era una sentencia de muerte para los caballos. Sin embargo, la doctora Goodrich tuvo una idea: aunque nunca lo había hecho antes, Shine era un buen candidato para una prótesis de última generación.
Las prótesis no suelen ser capaces de aguantar el peso de un caballo adulto, pero gracias al tamaño de Shine, podría resolver el problema y salvar su vida.
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"Es la primera prótesis que he hecho, pero siempre había querido intentarlo," admite la doctora Goodrich. "No teníamos ninguna forma de preservar su miembro. Así que tuvimos que amputársela, ya que era la única opción para conservar su vida."
Primero, el doctor contacto con OrthoPets para construir una pezuña personalizada. La compañía había trabajado con caballos miniatura antes, así que eran la opción perfecta para ayudar a Shine.
Utilizando una banda de rodadura similar a la de un neumático, la prótesis iba a ayudar a Shine a ponerse de pie en no mucho tiempo.
Finalmente, 4 meses después de la primera hospitalización, Shine estaba en casa.
"Hemos recorrido un largo camino desde esa horrible mañana cuando encontré a Shine sobre un charco de sangre después de ser atacado", escribieron sus dueñas en un post de Facebook. "Ha sido un largo camino. Shine nunca se rindió y nosotras tampoco."
"Esta tarde viajaremos al hospital veterinario CSU para llevar a nuestro bebé a casa", decían los dueños de Shine. "Le hemos echado mucho de menos en el rancho. Pero ha merecido la espera."
Esta es una historia increíble que puede servir como inspiración para otras personas. Sinceramente pienso que Shine es un verdadero ejemplo a seguir y también un caballo miniatura ¡muy, muy, adorable!
¡Comparte esta maravillosa historia con tus amigos! Fuente: Boredomtherapy
