A menos que tengas una boca prodigiosa, lo más seguro es que hayas tenido que lidiar con problemas de mal aliento alguna que otra vez. Para muchas personas en cambio, lo raro es no sufir mal aliento, algo realmente desafortunado pero de lo que no hay que avergonzarse ya que el 25% de la población tiene mal aliento de forma crónica. Así que sí tú o alguien que conoces sufre este problema, recuerda que no estás solo.
Sufrir halitosis genera un par de preguntas. Por un lado, ¿qué es lo que genera el mal aliento?, y por supuesto, ¿qué se puede hacer al respecto?
Es más fácil de explicar la causa que encontrar una solución infalible, pero a continuación encontrarás algunos consejos que seguro que sirven para reducir el mal aliento. Si tienes mal aliento, esta es probablemente la causa.
Aunque existen muchas causas diferentes que pueden llegar a producir mal aliento, lo más probable es que tengas a millones de bacterias apestosas dándose una fiesta en tu boca.
Los restos de comida o células muertas que tenemos en nuestra boca son el alimento perfecto de aquellas bacterias que causan el mal aliento. Estas mismas bacterias, con el tiempo crean algunos compuestos volátiles de azufre.
Existen al menos 150 compuestos que podemos encontrar en la boca, pero de todos estos 2 son los más abundantes.
Uno de ellos es el sulfuro de hidrógeno, lo que produce el olor característico a huevos podridos, y el otro es el metanotinol, que se parece más al olor de una col en descomposición.
Por supuesto no quieres ninguno de los dos en tu boca demasiado tiempo.
Cuando intentes deshacerte de estos compuestos, descubrirás que es bastante difícil deshacerte de ellos con un simple cepillado.
De hecho, es casi imposible que logres eliminar el mal aliento exclusivamente cepillándote los dientes aunque lo hagas de forma habitual.
Es importante que te asegures de beber mucha agua. Cuando tu boca se seca, las células muertas se acumulan en la boca sin que haya nada que las elimine, lo que crea un exquisito manjar para todas las bacterias que generan el mal aliento.
Puede ser buena idea utilizar un raspador de lengua. Este utensilio puede ayudarte a deshacerte de las bacterias o las partículas de alimentos no deseados de tu lengua. Sin embargo, no es una solución definitiva a este problema.
Algunos científicos recomiendan utilizar un tipo de bacteria "buena" que combate las bacterias "malas" que producen el mal olor.
Hay una investigación muy prometedora que presenta al Streptococcus salivarius K12 como solución al mal aliento. Este producto posee un elemento totalmente inofensivo para los humanos pero que las bacterias "malas" no soportan.
Por último, ten cuidado con el uso de enjuague bucal. Su utilización en exceso elimina tanto a las bacterias "buenas" como a las "malas", además, la base de alcohol que contienen puede secar la boca, lo que agravaría el problema.
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Fuente: Diply