La imagen de la mujer perfecta en la década de los 50 no fue impuesta por el marido, padre y hombre de la casa, para eso ya tenían la publicidad que se encargaba de enviar el mensaje alto y claro de cuál era el trabajo de la mujer, su lugar y finalidad en la vida.
El artista y fotógrafo Eli Rezkaliah ha reinterpretado alguno de los anuncios más famosos de aquella época pero con un radical cambio de género. Ahora ellas se ponen en sus zapatos y a ellos se les enseña cuál es su lugar.
¿Qué pasaría si cambiaran los roles de género?
Los hombres no dejan la cocina
Eli Rezkalla
"Todos sabemos que el lugar del hombre es en el hogar, cocinando un delicioso plato para la mujer. Si aún disfrutas de la vida de soltero y no has encontrado a la mujer que espera por ti, ven a Hardees a por algo delicioso y ya preparado".
¿Puede un hombre abrirlo?
Eli Rezkalla
elirezkallah
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Eli Rezkalla
Eli Rezkalla
"Una muestra de afecto está bien... pero ya basta. No podía mantener sus manos fuera de ella. Siempre los pequeños gestos, las palmaditas en la mejilla. Podría conducir a una mujer a dónde fuera. Todo comenzó cuando llevaba su primer par de Leggs, a la medida de Thomson. Pero ella guardó la cabeza; ahora todo está bajo control. ¿Por qué no probar un par de pantalones... y prepárate para cavar?"
No te preocupes cariño, no has quemado la cerveza
Eli Rezkalla
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