Según las Naciones Unidas, el medio ambiente es el conjunto de componentes físicos, químicos, biológicos y sociales capaces de causar efectos directos ó indirectos, en corto, mediano y largo plazo, sobre los seres vivos y las actividades humanas.
El hombre como agente transformador en la tierra, causa diferentes impactos de forma directa o indirecta en el medio ambiente y en el planeta, modificando ecosistemas frágiles y únicos en grandes metrópolis, obras, carreteras, monumentos, etc, que causan efectos ó perturban el medio ambiente.
Aunque esa última afirmación parezca bastante desesperanzadora, existen muchas formas para proteger y mantener el medio ambiente de nuestro planeta y hacer que nuestro impacto sobre él sea mucho más leve.
A continuación, te mostramos 9 hábitos que deberías incluir en tus propósitos de año nuevo para cuidar de nuestro planeta. 1- Reciclar
Puede parecer obvio, pero reciclar todo lo que puedas es una de las mejores cosas que puedes hacer para contribuir al mantenimiento del medio ambiente. Con el tiempo, las tasas de reciclaje en los hogares aumentan progresivamente cada año. Hay que continuar con esta tendencia, y ahora, más que nunca, es importante adquirir el hábito del reciclar todos nuestros desechos
2- Reutilizar el plástico
Cuanto menos plástico deseches, mejor. Trata de beber de una botella reutilizable en lugar de comprar botellas de agua todos los días. También es muy importante adquirir el hábito de reutilizar las bolsas de plástico de la compra para darle otros usos. Desgraciadamente, ocho millones de toneladas de plástico son arrojadas al mar cada año. Si se colocara toda esa basura a lo largo de las costas de la Tierra habría cinco bolsas de la compra llenas de plástico cada 30 centímetros
3- Come menos carne
La industria cárnica produce una huella de carbono sobre nuestro planeta de forma masiva. Comer carne contribuye a la tala de árboles necesarios para criar animales. Por otra parte, se necesitan unos 15.000 litros de agua para producir un kilo de carne de res, en comparación con los 1.500 litros necesarios para producir un kilo de trigo. Y por último, La cría de animales destinados a la alimentación genera de forma masiva desechos orgánicos, una de las principales fuentes de contaminación del agua.
4- Comparte el coche
Reducir las emisiones de gases es una gran forma muy fácil y efectiva de ayudar al mantenimiento del medio ambiente. Trata de compartir el coche con tus colegas o prueba a utilizar al transporte público o la bicicleta. Si te es imposible compartir los viajes en coche con alguna otra persona, considera la posibilidad de cambiar tu coche por uno híbrido que produzca menos emisiones de gases nocivos.
5- Ducha en lugar de baño
Optar por una ducha en lugar de un baño, es una de las mejores maneras de reducir la cantidad de agua que utilizamos a lo largo del día. También te recordamos que es muy importante cerrar el grifo mientras nos cepillamos los dientes o lavamos los platos, aunque no lo parezca, la cantidad de agua que podemos llegar a ahorrar con estas simples prácticas generan una repercusión bastante significativa sobre el medio ambiente y sobre nuestros bolsillos.
6- Participación activa
Existen muchas maneras en las que puedes participar como activista contra el cambio climático. Realiza una búsqueda rápida sobre lo que está sucediendo en tu entorno local para conocer en que áreas puedes involucrarte, ya sea recogiendo basura, participando como voluntario para una organización benéfica ambiental o ayudando a promover la concienciación respecto a este tema.
7- Se políticamente activo
La participación de un país en la lucha mundial para reducir las emisiones de carbono depende de sus dirigentes. Tristemente, no todos dan la importancia que merece este tema, por lo que es importante que te asegures de qué políticos y partidos son más sensibles a la introducción de medidas que aboguen por el mantenimiento del medio ambiente antes de las próximas elecciones.
8- Desperdicia menos alimentos
Solo en el Reino Unido se tiran más de siete millones de toneladas de alimentos y bebidas en los hogares cada año. Si paramos de desperdiciar la comida que todavía es comestible, el impacto que realizaríamos para el medio ambiente sería el equivalente a eliminar un cuarto de los coches que están en circulación y emiten gases contaminantes.
9- Come y compra localmente
Comer y comprar alimentos que se han producido cerca de casa es otro pequeño paso para ayudar al medio ambiente. De esta manera apoyas a los agricultores locales que no contaminan el medio ambiente enviando mercancías a largas distancias. De esta manera también se tiende a utilizar menos envases.
¡Comparte todos estos buenos hábitos con todos tus amigos! Fuente: Indy100