El atractivo de las personas es algo bastante subjetivo. No existen unas leyes estrictamente definidas que te convierten en un maestro de la seducción de la noche a la mañana. Sin embargo, eso no quiere decir que no haya ciertos hábitos y comportamientos que te puedan ayudar a conseguirlo.
Si pretendes convertirte en una máquina de ligar, además de saber qué hábitos debes mejorar, también debes aprender qué comportamientos debes desechar. Porque así es, también existen ciertas actitudes que hacen que bajes algunos puestos en el ranking del amor. Sigue leyendo y descubre qué comportamientos pueden estar saboteando tu propio atractivo sexual.
Estas son algunas de las cosas que te convierten en una persona menos atractiva:
1- La privación del sueño
Joel O'Brien/Shutterstock
Lo cierto es que no es nada sorprendente. Como ya sabemos, todos nos vemos mucho menos atractivos después de pasar una mala noche.
En 2010, unos investigadores realizaron un estudio que evaluaba cuánto influye las horas que descansamos en nuestro atractivo.
Para ello, los investigadores fotografiaron a dos grupos de personas: los que durmieron 8 horas la noche anterior y los que no habían pegado ojo en 31 horas. Para poder contrastar los resultados, otros participantes calificaron a las personas fotografiadas siguiendo diferentes criterios.
Además de percibir cierto cansancio en el rostro de los que no descansaron, las personas encargadas de calificar las fotografías también percibieron a los integrantes del segundo grupo menos atractivos, saludables y alegres.
2- Ser arrogante
pathdoc/Shutterstock
¿Es cierto que los chicos malos ligan más? Según un estudio chino realizado en 2014, no. Durante la investigación, una serie de voluntarios se dedicó a mirar y calificar una serie de fotografías en las que aparecían el rostro de hombres y mujeres con expresiones neutras.
Algunas de esas fotos contenían además las palabras "decente" y "honesto", mientras que otras contenían "malo" y "malvado". El resto de las imágenes no contenían ninguna información añadida.
Los resultados del estudio mostraron que los participantes calificaron como menos atractivas a aquellas personas que contenían alguno de los adjetivos negativos junto a su rostro.
3- Lenguaje corporal contractivo
Micolas/Shutterstock
La postura que mantenemos cuando hablamos influye enormemente en nuestro lenguaje corporal, y al parecer, un lenguaje corporal contractivo puede hacer que parezcas menos atractivo, o así lo dice un estudio realizado en 2016.
Durante el mismo, unos investigadores crearon una aplicación para citas que contenía diferentes perfiles de hombre y mujeres.
A la hora de tomar las fotografías que acompañaría cada uno de los perfiles, unos cuantos participantes fueron instados a tomar posiciones contractivas, como por ejemplo, cruzar los brazos o elevar los hombros. De igual forma, otros participantes fueron instados a tomar posturas expansivas.
Los resultados mostraron que las personas en posturas expansivas fueron seleccionadas con más frecuencia que aquellas que mostraron posturas contractivas.
4- Estrés
Syda Productions/Shutterstock
Un estudio de 2013 encontró que las mujeres que mostraban niveles más altos de cortisol (la hormona del estrés) también eran percibidas por hombres heterosexuales como mujeres menos atractivas.
Los investigadores sostienen que posiblemente se deba a que unos niveles más bajos de cortisol (un menos estrés) indican un posible mejor estado de salud y fertilidad.
5- Parecer demasiado feliz o demasiado orgulloso
Asier Romero/Shutterstock
Aunque la felicidad suele ser un rasgo atractivo en las mujeres, a las chicas no les gustan los chicos demasiado sonrientes.
Por el contrario, mientras que el orgullo es un rasgo atractivo en los hombres, a los chicos no les gustan las chicas que parecen demasiado orgullosas.
En 2011, unos investigadores realizaron un experimento que involucró a más de 1.000 personas. Durante el mismo, los participantes observaron una serie de fotografías de personas del sexo opuesto y tuvieron que clasificar cómo de atractivas les resultaban.
Los resultados mostraron que los hombres puntuaron más alto a las mujeres felices que a las orgullosas. Las mujeres en cambio vieron más atractivos a los hombres se mostraban orgullosos respecto a los que mostraban signos de felicidad.
6- Falta de sentido del humor
Carlos Die Banyuls/Shutterstock
Un estudio de 2009 encontró que incluso aquellas personas que tienen un sentido del humor promedio son menos atractivas que aquellas que destacan por su gracia.
El estudio también encontró que el género no jugaba un papel importante. Un sentido del humor nefasto era igual de poco atractivo tanto en hombres como en mujeres.
7- Ser demasiado perezoso
Evgeniia Freeman/Shutterstock
Según un estudio publicado en 2004, el atractivo de una persona depende de rasgos tan sorprendentes como el grado de utilidad.
Durante uno de los experimentos, unos estudiantes de arqueología que se disponían a realizar un curso de seis semanas debieron clasificar la personalidad y el atractivo de sus compañeros tanto al inicio como al final del curso.
Cuando analizaron los resultados, los investigadores encontraron que aquellas personas que destacaron por ser perezosas durante las clases resultaron menos atractivas al final del curso.
8- Oler demasiado o muy diferente
pathdoc/Shutterstock
La ciencia sugiere que los seres humanos buscamos compañeros que no sean genéticamente demasiado similares o diferentes a nosotros mismos, y que para ello nos basamos en el olor corporal.
En un estudio realizado en 2006, los investigadores escogieron a unas cuantas parejas heterosexuales para que respondiesen a preguntas como: cuánto les excitaba su pareja o con cuántas personas habían tenido relaciones sexuales durante el curso de la relación.
Además, los investigadores tomaron el ADN de la boca de los participantes para comparar la histocompatibilidad entre los genes de sus sistemas inmune.
Los investigadores encontraron que cuanto más similares eran sus genes, menos se atraían las parejas y más probabilidades tenían de tener relaciones sexuales fuera de la relación.
Al mismo tiempo, otros estudios también han descubierto que evitamos compañeros que huelan demasiado diferentes de nosotros.
