Cuando te diagnostican un quiste ovárico, el ginecólogo, por norma general, te recomienda volver a la consulta unas 5 semanas después para ver cómo evoluciona. La mayoría de los quistes desaparecen por sí solos, pero hay otros que deben ser tratados con medicamentos o, como última instancia, con cirugía.
Afortunadamente, durante esas 5 semanas no tienes porqué quedarte parada sin hacer nada, puedes optar por ser proactiva y acelerar el proceso para que el quiste desaparezca antes.
Este es el mejor tratamiento natural para los quistes ováricos
La clave para deshacerte de un quiste ovárico es equilibrar los niveles de hormonas y disminuir los factores que contribuyen a su desarrollo. Demasiada exposición a estrógenos y xenoestrógenos (imitadores de estrógenos) puede interrumpir la ovulación y conducir a la formación de quistes.
Esto es todo lo que debes evitar
- Productos de soja procesados. Contienen compuestos que imitan el estrógeno, creando un desequilibrio hormonal.
- Calentar o almacenar alimentos calientes en envases de plástico. Existen productos químicos en este material que se liberan cuando se calienta y acaban introduciéndose en la comida. Usa recipientes de vidrio en su lugar.
- Botellas de agua de plástico. Por las mismas razones de antes.
Productos para el cuidado de la piel con parabenos. La aplicación de parabenos directamente en la piel hace que el cuerpo los absorba muy fácilmente.
Esto es todo lo que debes tratar de hacer
- Comer solo carnes y lácteos orgánicos. De esta manera evitarás los aditivos que pueden aumentar los niveles de estrógeno y promover el crecimiento de quistes.
- Usar detergentes naturales. Muchos detergentes para ropa contienen químicos xenoestrógenos, si lavas tu ropa con ellos, estos químicos pueden filtrarse en tu piel.
- Usar remedios herbales. Las hierbas pueden ayudar a regular los ciclos menstruales, a reducir el dolor en los ovarios, a aumentar la circulación en los órganos reproductores y a respaldar la función hepática. Recuerda que no debes usar remedios herbales si estás embarazada o amamantando.
- Aplicarte aceite de ricino. Empapa un paño en aceite de ricino y colócalo sobre tu piel para mejorar la circulación reproductiva y promover la curación de los tejidos y órganos corporales. Recuerda que el aceite de ricino no debe consumirse ni aplicarse sobre heridas y debes evitar utilizarlo si estás embarazada, amamantando o menstruando.
Ten en cuenta que antes de poner en práctica cualquiera de estos consejos, es importante que lo consultes con tu médico para asegurarte de que puede ser beneficioso en tu caso.
¿Pondrás en práctica estos consejos? ¡Cuéntanoslo en los comentarios! ¡Comparte este interesante artículo con todos tus amigos! Fuente: Healthy Holistic Living Este artículo se ha realizado únicamente con fines informativos, no está destinado a proporcionar asesoramiento médico. ROLLOID no se responsabiliza de las posibles consecuencias de cualquier tratamiento, procedimiento, ejercicio o modificación de la dieta, que se ponga en práctica tras la lectura de esta publicación.