Menú de andar por casa, abandono en vivo directo tras una fuerte discusión y festival de bailes sensuales como fin de fiesta. Pero nada de eso ha hecho perdernos cada recoveco de la humilde morada de Oriana Marzoli. Seguramente desearás que te invite a comer a su casa.
Un vestidor de infarto, un salón muy cool y una cocina minúscula
Esperemos que hayas tomado nota de la cena con la que ha querido competir Oriana. Unos platos prácticos que te sacan de apuros en algún momento determinado como son las ensaladas César y Caprese, o el postre casero que todo niño querría tener en su nevera. Y todo esto alrededor de un cuqui-piso que no le falta un sólo detalle. Mirad.
El pisito de Oriana Marzoli, ubicado en plena Castellana madrileña, es de esos hogares acogedores pero que si los pones a tu gusto, molan. El salón comparte espacio con el comedor pero es lo suficientemente amplio como para no entrar en agobio.
La parte más negativa de la casa quizá sea el minúsculo tamaño de la cocina, que aunque no le falta un detalle de electrónica, utensilios o mobiliario, le hace el apaño. Y todo esto rodeado de una decoración demasiado juvenil que contrasta con su feminidad en tonos pastel.
Y aquí otras tres estancias de la casa de la colaboradora de Telecinco, o como ella dice, "experta en realities". Una zona de estar amplia, iluminada, agradable y relajante gracias a la combinación de colores suaves que ha utilizado. En el mismo lugar, pero al entrar, encuentras la mesa donde se llevó a cabo Ven a cenar conmigo: Summer edition.
Y por supuesto, la joya de la corona. Una habitación exclusivamente dedicada a su más preciada moda y complementos. Un amplísimo vestidor, que pudieron husmear Carmen Alcayde y Mónica Hoyos, repleto de ropa hasta en el último centímetro de mueble.
