Mucha gente tiene problemas de salud debido a sus niveles de ácido úrico. Decimos niveles porque todos tenemos este compuesto en nuestra sangre pero solo causa problemas cuando la cantidad aumentan. Por ello, siempre debemos mantener bajos los niveles y lo conseguiremos observando lo que comemos.
Pero, ¿qué es el ácido úrico? Se trata de un desecho en nuestra sangre que proviene de células muertas que, en cantidades elevadas, puede afectar a los riñones volviéndolos incapaces de filtrar y provocando una enfermedad conocida como hiperuricemia. Si no ponemos medio de forma rápida, seguirá aumentando, cristalizándose en articulaciones y tejido muscular. Hay algunas frutas que pueden ayudarte a reducir los niveles.
6 Frutas que te ayudarán a reducir los niveles de ácido úrico
1- Plátanos
Los plátanos son muy beneficiosos para reducir los niveles de ácido úrico. Una dieta que estuviese basada únicamente en plátanos, ingiriendo 8-9 plátanos al día, ayudaría a reducir la hinchazón y la inflamación de las articulaciones causadas por la gota.
2- Manzanas
Contienen ácido málico que se neutraliza con el ácido úrico y aporta alivio a los enfermos. La porción recomendada es una pieza al día después de una comida.
3- Arándanos
Esta fruta tiene mucha vitamina C y antocianinas, unas sustancias antiinflamatorias que ayudan a reducir los niveles.
4- Cítricos
Gracias a su alto contenido en vitamina C, pueden reducir los niveles de ácido úrico ya que se ha comprobado que esta vitamina tiene una gran capacidad para realizar esta misión.
5- Fresas
La fresa es una de las mejores frutas para realizar esta función ya que tiene una gran capacidad para neutralizar los compuestos químicos del cuerpo.
6- Cerezas
Las cerezas tienen antocianina que ayuda a reducir los niveles de ácido úrico, evitando que se cristalice y se deposite en las articulaciones. También neutraliza los ácidos por lo que previene la inflamación y el dolor.
Estas frutas consiguen que tu ácido úrico disminuya pero además deberás controlar el resto de comidas. Tienes que ser consciente de que puede llegar a ser peligroso y más vale prevenir que curar. Ahora que conoces las frutas beneficiosas, ¿a qué esperas para probarlas?