Desde que somos pequeños nos enseñan que debemos controlar muy bien nuestros esfínteres para poder aguantar sin orinar todo lo que queramos. Seguramente a ti también te ha pasado más de una vez eso de estar en la calle y necesitar ir al servicio con urgencia. En momentos así, solo te quedan dos opciones: o entras en algún sitio, consumes y vas al baño, o aguantas hasta que llegas a casa.
La mayoría de personas suelen optar por la segunda opción: aguantar hasta llegar a casa. Sin embargo, probablemente esta no sea la alternativa más recomendable.
¿Es malo aguantar el pipi mucho tiempo?
Es normal que en algún momento necesites aguantar la orina unos minutos, el problema está cuando esto se convierte en un hábito. Aguantar las ganas de hacer pipí constantemente puede traer consecuencias bastante graves como las que te vamos a explicar a continuación.
1- Infecciones de orina
Mantener la orina durante muchas horas puede dar lugar a una infección urinaria. La orina incluye todas las sustancias de desecho de las que el cuerpo necesita deshacerse. Por lo tanto, en la vejiga se acumulan tanto sustancias ácidas como amoníacos que pueden dañar las paredes del tracto urinario, provocando así una infección.
2- Agrandamiento de la vejiga
Cada vejiga es un mundo, pero, por norma general, admite entre 150 y 220 ml de líquido. Conforme se va llenando, se activan unos receptores que avisan a nuestro cerebro de que ya es hora de acudir al baño. Si en ese momento no vamos y seguimos aguantando, la vejiga se llenará cada vez más. Es entonces cuando comienzan las molestias y los dolores.
El hecho de que la vejiga se llene tanto, hace que sus paredes comiencen a ensancharse, lo que puede provocar diversos daños.
3- Cálculos en los riñones
El dolor que provoca un cólico nefrítico es de los más graves que hay. Si tomas como hábito aguantar la orina demasiado tiempo, estarás incrementando tus posibilidades de sufrir un cólico nefrítico. Esto se debe a que en tus riñones comienzan a formarse pequeños cristalitos, generalmente originados por el calcio, el fosfato, el amonio y el magnesio. Estos residuos se instalan en los riñones y forman piedras que son muy difíciles de eliminar.
4- Reflujo vestido-uretral
El reflujo vestido-uretral se genera cuando la orina, en lugar de ser expulsada al exterior, después de llevar un tiempo en la vejiga, vuelve a la uretra y a los riñones. Esto puede llegar a ocasionar infecciones muy graves. Debemos tener mucho cuidado puesto que esta condición también puede provocarnos lesiones renales severas.
5- Malestar, calambres y cansancio
Aunque no haya infección, ni cálculos ni reflujo, el simple hecho de aguantar demasiado tiempo la orina, ya provoca malestar, calambres y cansancio. Por ello es importante que, si te entran ganas de orinar, no tardes más de 10 o 15 minutos en ir al baño.
¿Sabías lo peligroso que podía llegar a ser aguantar el pipí? ¡Cuéntanoslo en los comentarios! ¡Comparte este interesante artículo con todos tus amigos! Fuente: Mejor con salud