Cuando se trata de vender, los dependientes de las tiendas están entrenados para hacerlo lo mejor posible. Lo que a la firma le interesa, en la mayoría de los casos, es ganar dinero, no que tú ahorres o que las prendas puedas aprovecharlas durante muchos años. Por ello, hay muchos datos que te ocultan para que entre las opciones de "comprar" o "no comprar", siempre te decantes por la primera.

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Las rebajas tienen como misión hacer que compres prendas de colecciones pasadas que no tenías pensado comprar. Son excedentes que a las tiendas les cuesta mucho vender a su precio original. Es muy complicado resistirse a un descuento, por lo que al final siempre acabamos pecando más de lo que nos gustaría.

Por otro lado, hay empresas que incluso llegan a subir los precios de sus artículos unas semanas antes para que, cuando lleguen las rebajas, el descuento parezca mayor.

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Seguramente te hayas dado cuenta de que, cuando entras en las tiendas, la zona de nueva colección siempre está muy ordenada mientras que, en la de rebajas, las prendas están amontonadas, liadas entre sí e incluso tiradas por los suelos.

No es que las dependientas no tengan tiempo de ordenarlo, sino que lo dejan así para que te sientas una afortunada al encontrar una prenda que te guste y vayas corriendo a la cola para pagarla.

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Incluso si un artículo está etiquetado como "100% natural", puede ser peligroso para tu salud. La fabricación de la ropa, en muchos casos implica el uso de productos químicos que no pueden ser identificados sin las pruebas de laboratorio adecuadas.

Lava muy bien todas las prendas antes de usarlas, de esta manera eliminarás gran parte de los químicos que han utilizado en su manufacturación y evitarás que te provoquen alguna reacción.

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Aunque los dependientes te aseguren que son excedentes de prendas de otras temporadas, en muchas ocasiones lo que venden son prendas con taras, prototipos de otros modelos e incluso ropa que está fabricada con materiales de peor calidad.

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Seguramente más de una vez te han asegurado que la prenda que estabas dudando si comprar o no iba a llevarse durante muchos años más y finalmente pasó de moda en seguida. No te preocupes, a todos nos ha pasado.

Las tendencias cambian todos los meses y lo que hoy se lleva probablemente dentro de dos o tres meses ya esté anticuado. Si eso no te importa, genial, pero si tu intención es ir a la última, deberías tenerlo en cuenta.

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Sabiendo todo esto, estoy segura de que la próxima vez que vayas de compras te lo pensarás dos veces antes de caer en la tentación. No dejes que te engañen y fíate de tu instinto, a veces nuestro sexto sentido es mucho más poderoso que los otros cinco juntos.

¿Tenías idea de estas estrategias comerciales? ¡Cuéntanoslo en los comentarios! ¡Comparte este interesante artículo con todos tus amigos! Imagen de portada: Shutterstock