La zona íntima es una parte del cuerpo muy delicada de la que debes cuidar especialmente si no quieres tener complicaciones.
Debes prevenir cualquier tipo de bacteria que pueda colarse en tu zona íntima y, para ello, tienes que tener una buena rutina de higiene y evitar ciertas cosas que haces a diario.
Prácticas habituales que acabarán con tu salud íntima
1- Salvaslips
Vas a salir de casa y te colocas un salvaslips en las braguitas, y lo más común es que repitas esta práctica todos los días. La utilidad de estas toallitas higiénicas es absorber el flujo cuando vamos a empezar o acabamos de terminar la menstruación.
Los elementos empleados para su fabricación hacen que se cree cierta humedad en tu zona íntima y que se caliente lo que aumenta las posibilidades de contraer alguna infección.
2- No ir al baño después del sexo
Cuando mantienes relaciones sexuales con tu pareja y habéis dado por finalizado el encuentro, normalmente te diriges al baño para lavarte las manos y limpiarte la zona íntima pero no haces lo más importante: hacer pis.
Cuando orinas expulsas todas las posibles bacterias que hayan podido quedar en la zona después del sexo. Además te aseguras de que la zona no queda bloqueada si intentas aguantar las ganas por cualquier motivo.
3- Depilación constante
Es normal que haya veces que te apetezca retirarte el vello de la zona, pero tienes que tener en cuenta que el pelo nace como un mecanismo de defensa para que las bacterias no puedan acceder tan fácilmente.
Puedes depilar la zona con total normalidad, pero deja también que el desarrollo de tu cuerpo siga su curso de vez en cuando y que el pelo crezca.
4- Apurar al máximo
A veces apuramos demasiado las compresas y tampones cuando tenemos la regla, lo que podría estar provocando graves complicaciones en tu organismo por la cantidad de flujo acumulado que hay.
Trata de cambiarlo cada cuatro horas, es lo ideal para que llene su capacidad y no se produzca ningún tipo de infecciones.
5- Bañador mojado
Las bacterias se generan con mayor facilidad en sitios húmedos, y tu zona íntima es uno de ellos cuando sales del agua y te dejas puesto el bañador mojado todo el tiempo. Ten cuidado y evita hacer esta práctica muy a menudo.
