El estrés es la reacción que tiene el organismo frente a momentos de tensión o amenaza. Se pone en alerta y activa una serie de reacciones bioquímicas para conseguir salvar a esa persona del posible peligro. Entre estas reacciones se encuentra la producción y liberación de neurosustancias llamadas catecolaminas, entre las que se encuentran la noradrenalina, la adrenalina o el cortisol.
Las primeras dilatan los vasos sanguíneos de los órganos vitales para asegurar la circulación en ellos y disminuirla en lugares menos importantes. La última transforma la grasa en energía y aumenta la glucemia. Esta liberación de hormonas podría aumentar el riesgo cardíaco y los triglicéridos y reducir la producción de insulina.
20 Formas en las que el estrés afecta a tu cuerpo
1- Dolor muscular
Comienzan a dolernos algunos músculos por culpa del estrés al que está sometido nuestro cuerpo.
2- Ser impaciente
3- Estar débil
4- Enfadarte
Te enfadas por todo y no sueles tolerar ningún comentario. Además, eres mucho menos permisivo.
5- Tener palpitaciones
6- Diarrea
Afecta a nuestro sistema digestivo y descompone nuestra barriga. Recuerda hidratarte mucho cuando te ocurra.
7- Dificultad para respirar
8- Pérdidas de memoria
fizkes / Shutterstock
9- Escalofríos
10- Caída de pelo
11- Tensión excesiva
Suele ser un síntoma constante.
12- Problemas de piel
Puede provocar o agravar enfermedades de la piel, como caspa, psoriasis, herpes, sudor excesivo o vitíligo.
13- Temblores
14- Fatiga
Esto puede ocurrir incluso después de realizar actividades sencillas que no requieren demasiado esfuerzo.
15- Estar irritado
16- Sudor frío
17- Dificultad para dormir
Comienzas a tener problemas de insomnio y te cuesta mucho dormir por las noches de forma continuada.
18- Vértigo
19- Boca seca
20- Hormigueo
Sin embargo, la presencia de los síntomas por si solos no es una característica del estrés. Se deben dar otras manifestaciones y estudiar el contexto de la persona. Para solucionarlo, prueba a llevar una alimentación saludable, a realizar actividad física y a cambiar hábitos, como dormir adecuadamente y mantener un equilibrio entre trabajo, familia y ocio. Meditar o practicar yoga también podría ayudarte.
Debes saber que, a largo plazo, el estrés puede causar ansiedad, pánico y problemas psiquiátricos. También se asocian los problemas de tiroides y la diabetes. Por ello, debes hacer algo para solucionarlo.
