En el mundo de los estándares poco realistas y la moda del Photoshop, la verdadera belleza es una bocanada de aire fresco. Y mientras algunos comparten sus selfies inéditos en Instagram, Olga Kamenetskaya crea magníficas muñecas que parecen casi reales.
Olga es una artista ucraniana que comenzó a pintar muñecas como un pasatiempo, pero luego se convirtió en su profesión. Coge muñecas producidas en serie, como Monster High girls o Barbies, y las convierte en muñecas totalmente nuevas, únicas y especiales. Cada una tiene pequeños "defectos", como las personas reales, que incluye no solo repintar sino también modificar las formas de las muñecas y trabajar con pelucas.
"No me gusta cuando la nueva cara de la muñeca es ideal y perfectamente simétrica, la deja sin vida", le dijo Olga a Vogue. "Siempre dejo deliberadamente algún defecto que puede no ser notable para todos, pero le da carisma invisible a la muñeca. Quizás, esta belleza defectuosa es el mensaje que llevan mis muñecas".
El mundo del arte con muñecas es un universo en el que numerosos artistas parecen mezclar arte con magia, para conseguir muñecas de manera realista y detallada.
Algunos tienen miedo por el realismo que llegan alcanzar las muñecas de Olga, pero otros, por el contrario, admiran esa estética. Creemos que las obras de Olga se distinguen del resto por el humanismo que hay en ellas.
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