Cuando pensamos en ansiedad, a menudo pensamos en una condición de salud mental que induce sentimientos de preocupación, miedo y nerviosismo.
Pero, aunque estamos en lo cierto al suponer que este es un problema que comienza en el cerebro, en realidad es tanto un estado físico como mental.
Síntomas de que tenemos ansiedad
1- Dolor en el pecho y palpitaciones del corazón
Cuando te sientas ansioso o tienes un ataque de pánico en toda regla, el corazón late más rápido para bombear más sangre alrededor del cuerpo para prepararse.
Esta acción puede causar hiperventilación que lleva a inhalar demasiado oxígeno. Esto, a su vez, causa una contracción de los vasos sanguíneos lo que puede provocar dolor en el pecho.
El dolor en el pecho causado por la ansiedad a menudo se siente en diferentes áreas del pecho y aparece y desaparece. También es importante tener en cuenta que una descarga de adrenalina no daña el corazón.
2- Falta de aliento
Lo mismo se aplica en cuanto a por qué sentimos la falta de aliento o presión en el pecho durante los períodos de ansiedad. También somos muy conscientes de nuestra respiración, lo que podemos hace es respirar lentamente para autoregularnos.
3- Extremidades y dolor muscular
Hay muchas maneras en que la ansiedad puede afectar las extremidades. La tensión en los músculos es causada por el estrés: Experimentar el estrés diario puede endurecer los músculos y hacer que te duelan.
La postura también puede afectarte, si tu cuerpo está nervioso, puedes moverte más rápido o más despacio y rara vez estás relajado por completo. Cuando te sientes ansioso, es fácil olvidarte de cómo cuidar de ti mismo, ya sea comiendo sano, haciendo ejercicio o manteniéndote hidratado.
4- Hormigueo y entumecimiento de la piel / sensación de debilidad
Es común que la ansiedad cause sensación de entumecimiento y hormigueo. Esto puede ocurrir casi en cualquier parte del cuerpo, pero se siente más comúnmente en la cara, las manos, los brazos, los pies y las piernas.
Es causado por la sangre fluye a las partes más importantes del cuerpo que pueden ayudarte a relajar.
5- Calor, sudor y escalofríos
El estado de excitación (provocado por una descarga de adrenalina) también provoca un aumento de la temperatura. El cuerpo reacciona al tratar de calmarlo, por eso transpiras.
Tal sudoración, a su vez, puede hacerte sentir frío. Especialmente después de un ataque de pánico, a medida que tu cuerpo comienza a enfriarse pero aún transpira para evitar el sobrecalentamiento, es común sentir frío y escalofríos.
6- Mareos
Durante un período de aumento de la adrenalina y el pánico, el corazón bombea con mayor fuerza, lo que se asocia con un aumento de la presión sanguínea. Es este aumento de la presión arterial lo que nos hace sentir mareados.
7- Dolores de cabeza
Los ataques de ansiedad y de pánico comúnmente causan dolores de cabeza por la tensión debido a la acumulación de estrés. Puedes sentirte apagado y el dolor puede aparecer en diferentes áreas de la cabeza.
8- Problemas de sueño
La acumulación de estrés y la tensión pueden dificultar el sueño, al igual que la preocupación continua y la imposibilidad de desconectar. Lo mejor que puedes hacer aquí es probar una técnica de atención plena o meditación para ayudar a tu mente y cuerpo a dormirse.
9- Sensaciones estomacales
Muchas personas cuando entran en estado de pánico tienden a darle fuertes dolores de estómago y ganas de ir al baño. Esta es la forma en que el cuerpo trata de deshacerse de cualquier peso no deseado que podría hacerte pasarlo mal.
10- Sensaciones auditivas
Cuando te sientes ansioso y tu mente va muy rápido puede ser difícil centrarse en los sonidos que te rodean. Por otro lado, cuando estás alerta al peligro potencial a tu alrededor, puedes ser más sensible a los sonidos que de otra forma ignorarías.
11- Visión borrosa
Es común experimentar visión borrosa durante un aumento de adrenalina. Esto se debe a que las pupilas se dilatan para permitir que entre más luz en nuestros ojos. Sin embargo, mientras haya más luz también puede ocasionar visión borrosa.
12- Manchas y acné
Existen múltiples razones por las cuales la ansiedad y el estrés pueden causar brotes de acné en adultos. El aumento de la producción de la hormona del estrés puede aumentar la cantidad de aceite que produce tu piel.
También, el aumento de la sudoración que puede obstruir los poros y si te tocas la piel por estar inquieto y nervioso, puedes transferir la suciedad de tus manos a tu piel y lo hace más propenso a los brotes.
13- Pensamientos inútiles
Es común tener miedo cuando estás en un estado de ansiedad que, para algunos, es un temor que te puede volverles completamente loco. Si la ansiedad es un sentimiento nuevo para ti, las sensaciones desconocidas pueden hacer que tu cerebro piense demasiado y no dejes de parar de pensar en la situación.