Le costó un poco más de dos meses a la familia de Jordy decidir, de una vez por todas, que ya no querían que formara parte de sus vidas.
Y así, en una soleada tarde de California, reunieron todos sus juguetes, algo de comida y su manta favorita, y lo entregaron al Carson Animal Shepherd en Gardena, California.
Jordy, que tenía apenas 2 meses de edad, estaba confundido por la deslumbrante traición que literalmente le envió ondas de choque a su pequeño cuerpo. De acuerdo con la información del refugio, inmediatamente se desconectó emocionalmente de su realidad, levantando su pequeña cabeza solo para comer de vez en cuando y beber pequeños sorbos de agua para distraerse de forma temporal del dolor del rechazo sufrido.
Desafortunadamente para Jordy, lo que está en juego no podría ser más arriesgado de lo que es. Porque si no encuentra un hogar en las próximas semanas, podría ser sacrificado para liberar el espacio valioso de las perreras, ya que Carson Animal Shelter lidia con una sobrepoblación y unos recursos limitados.
Una descripción del perro dice:
"MI NOMBRE ES JORDY Y ME DESCRIBEN COMO UN PERRO PASTOR ALEMÁN MACHO. EL REFUGIO PIENSA QUE TENGO UNAS 9 SEMANAS DE EDAD".
A su edad, Jordy no debería llorar todas las noches a la hora de dormir. Debería estar en un campo jugando en algún lugar, disfrutando de todos los abrazos, cariños y besos de unos padres cariñosos que se preocupan por él. En cambio, se encuentra tumbado en una losa de hormigón fría, y con algunos juguetes masticados como único consuelo a su dolor.
Es una pena que cada día un gran número de perros y, sobre todo, cachorros tengan que sufrir ansiedad por la separación o por la mala conducta de unos dueños irresponsables y sin corazón.
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