Constance Hall es el nombre con el que se hace llamar en Facebook esta bloguera, cuya publicación reflexionando sobre la equidad en el reparto de las tareas domésticas hace un par de semanas ha conseguido ya más de 130.000 compartidos.
La viral reflexión de una bloguera australiana sobre el reparto de tareas domésticas
En la publicación, cuenta que después de una conversación con sus amigas en la que se quejó de hacerlo «absolutamente todo en casa», una le sugirió que si quería ayuda tenía que ser «específica» y pedírselo directamente a su pareja. «La gente necesita listas, no lee la mente», le dijo.
Y cuenta que así lo hizo: «Así que lo intenté, preguntando cosas concretas. ¿Puedes sacar la basura? ¿Puedes despertar a los niños? Estoy cansada de hacerlo siempre yo. Y sí, tenía razón. Las cosas se hacían».
«Sin embargo, estaba agotada de hacer malabares, siempre recordándole lo que quería que hiciera, discutiendo todo el rato…¿Y sabéis lo que pasó en el momento en el que dejé de preguntar? NADA. De nuevo», cuenta.
«Así he llegado a la conclusión de que no es tu trabajo pedir ayuda, no es mi trabajo tener que escribir malditas listas… Ya tengo suficientes cosas que hacer; pero enseñar a alguien a tenerme consideración a mi y a mi carga de trabajo no está entre ellas».
«Solo hazlo. Solo piensa en el otro y lo que supone llevar una casa. ¿Uno de los dos trabajando mientras el otro está tumbado?… Cuando las discusiones paran, las preguntas se agotan y no hay más listas… todo lo que queda es un silencioso resentimiento. Y eso amigos, es un cáncer para la relación«.
Así que, como conclusión y consejo explica lo siguiente: «No le corresponde a nadie enseñarte a tenerle en cuenta. Ese es tu trabajo. Lava los puñeteros platos en lugar de que te lo tengan que pedir».