Ya hemos hablado en algunas ocasiones sobre la relación que existe entre la mente, el cuerpo y el alma y la importancia de mantener estos tres elementos correctamente equilibrados y en armonía. Sin embargo, ¿alguna vez has escuchado hablar del que podría ser el músculo del alma? Bueno, la terapeuta y cineasta Danielle Prohom Olson afirma que al relajar su psoas, o lo que ella llama "el músculo del alma", puede volver a conectar con la poderosa energía de la Tierra.
¿Qué es el Psoas?
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El psoas mayor es literalmente el músculo más profundo del cuerpo humano. Este se origina en las vértebras T12 y las cinco primeras lumbares (T12-L5), así como en la base de las apófisis transversa correspondientes, y desciende hacia la fosa ilíaca del coxal dónde se une con la porción ilíaca.
El psoas es crucial para un movimiento corporal adecuado, ya que afecta a nuestro equilibrio estructural, integridad muscular, flexibilidad, fuerza, amplitud de movimiento, movilidad de las articulaciones y funcionamiento de órganos. Sin el psoas no seríamos capaces de mantener la postura o mover las piernas para caminar. Este músculo actúa como una especie de puente colgante entre el tronco y las piernas, transfiriendo el peso de arriba abajo y transmitiendo flujos energéticos en ambas direcciones. Al mismo tiempo, un psoas sano realiza una función de estabilización de la columna vertebral.
El psoas es el único músculo que une la columna vertebral a las piernas. El psoas también está vinculado al diafragma a través de la fascia (tejido conectivo), afectando a nuestros miedos y la respiración debido a la conexión entre el psoas y el cerebro reptiliano, la parte más antigua del tronco encefálico y la médula espinal.
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Liz Koch, autora de 'The Psaos Book' explica: "Mucho antes de que la palabra hablada o la capacidad organizadora del cortex se desarrollara, el cerebro reptiliano, conocido por sus instintos de supervivencia, mantuvo nuestro funcionamiento básico esencial".
¿Por qué el Psoas es considerado el músculo del alma?
Antes de indagar en la conexión que existe entre el psoas y la energía, Olson empezó a practicar poses de apertura de cadera al principio y al final de sus sesiones de yoga. Aunque su intención era simplemente relajar el psoas, al hacerlo, experimentó una disminución significativa en la tensión y una nueva fortaleza. Una vez que conoció la investigación de Koch y el taoísmo, conectó los puntos entre el psoas, el estrés y la espiritualidad y comenzó a referirse al psoas como "el músculo del alma".
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El taoísmo es una filosofía, a menudo referida como una religión, que intenta explicar nuestra relación con la naturaleza y el universo. Los taoístas practicantes se centran fuertemente en la autenticidad, la salud, la inmortalidad, el desapego, la espontaneidad, la transformación y la espiritualidad. Dentro de la tradición taoísta, el psoas es considerado el asiento o el músculo del alma y reside en el "Dan tien" más bajo, uno de los centros de energía más prominentes del cuerpo humano. Se dice que un psoas flexible y fuerte nos conecta a la tierra y hace que circule la energía en todo el cuerpo.
Relación entre el estrés y el psoas y cómo liberarlo
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El estrés, la ansiedad y el miedo suelen ser percibidos como problemas de salud mental, por lo que los médicos suelen prescribir medicamentos que tienen que ver con la mente. Aunque este método ha ayudado a muchas personas, deberíamos mirar el estrés a través de una perspectiva más amplia y tratar de entender qué causa estos desequilibrios emocionales, incluyendo la relación que existe entre el estrés y el psoas. A través de sus investigaciones, Koch y Olson han descubierto que al abrir el psoas podemos liberar el estrés y la tensión acumulada.
Koch cree que los desencadenantes crónicos y el endurecimiento de los psoas son productos de un estilo de vida rápido y poco saludable, así como otros elementos comunes de la vida moderna, como las sillas donde nos sentamos, los pantalones constrictivos que utilizamos o los zapatos con los que caminamos. Si continuamente contraemos el psoas debido a altos niveles de estrés, el músculo se acorta causando efectos secundarios negativos como dolor de espalda, ciática, problemas de disco, escoliosis, degeneración de cadera, dolor de menstruación, infertilidad y problemas digestivos.
