Al igual que la tasa de obesidad entre los niños han ido aumentando en los últimos años, la diabetes de tipo 2 afecta cada vez a un número mayor de adolescentes.
A sus 14 años, Pantera aprendió de primera mano lo que era la diabetes cuando comenzó a notar algunos cambios en su salud. Un día se percató que extrañamente se sentía sedienta constantemente y que sufría dolores de cabeza demasiado a menudo, aunque no fue solo eso lo que descubrió. Un día se encontró unos extraños anillos de color oscuro alrededor de su cuello. Al principio su madre pensó que solo era suciedad, pero esas manchas oscuras terminaron convirtiéndose en unas ronchas rojas propias de la diabetes de tipo 2.
Los médicos afirman que esas manchas son producidas porque la insulina no funciona correctamente, algo común en la diabetes de tipo 2. Este tipo de enfermedad afecta de forma crónica al cuerpo en la manera en la que se metaboliza el azúcar.
Además del cuello, otras zonas del cuerpo pueden verse afectadas con esta oscura pigmentación conocida como «Acantosis Nigricans», pudiendo afectar a las ingles o la las axilas. Según la web de AOCD.org, unos niveles elevados de insulina en el cuerpo activa los receptores de insulina en la piel, haciendo que aparezca ese pigmento anormal.
Conoce más a cerca de estas manchas.
A los 14 años de edad, Pantera notó que tenía sed constantemente y que sufría dolores de cabeza con demasiada frecuencia, pero fue gracias a unas extrañas manchas que aparecieron por su cuello lo que hizo que los doctores barajasen la posibilidad de que sufriera diabetes de tipo 2.
Por el momento, Pantera tiene que inyectarse insulina y controlar los niveles de azúcar en su sangre diariamente.
Los médicos afirman que las manchas que aparecen alrededor del cuello podrían ser un síntoma producido por un fallo en el funcionamiento de la insulina en nuestro cuerpo.