Normalmente, cuando los bebés no están cómodos o les pasa algo, la única manera que conocen de poder expresarlo es llorando.
Los bebés «malhumorados» pueden estar sufriendo de varias cosas – incluyendo dolores de barriga, estreñimiento, congestión o alguna gripe.
Y aunque es crucial llevar a rajatabla todos los tratamientos y medicinas recetadas por los pediatras para garantizar la salud de nuestros hijos, existen muchos remedios caseros realmente efectivos para calmar a los bebés y que pueden ser una gran ayuda para el día a día de los padres.
En esta guía que os dejamos a continuación, os damos algunos consejos sobre reflexología de los pies de vuestros bebés que podrían ayudarte a calmar hasta el mayor de los berrinches.
Cada área del pie se corresponde con distintos órganos, músculos, y partes del cuerpo – y aplicando presión en esas áreas, puedes ayudar a calmar esas molestias que pueden estar causadas por congestiones y obstrucciones.
La reflexología de los pies es muy conocida por tener unos asombrosos resultados y efectos terapéuticos, incluso con los adultos, por lo que esta guía también servirá para los más mayores.
Sin embargo, los bebés tienen todavía sus ligamentos y músculos en desarrollo, y esa es la razón por lo que tienden a ser más receptivos a los masajes en los pies.
No te pierdas estos fantásticos consejos sobre la reflexología de pies:
La guía para la Reflexología de pies en Bebés
Los bebés suelen reaccionar mucho mejor a los distintos tipos de reflexología que los adultos.
Cuando un niño llora o experimenta algún tipo de molestia, solemos tender a frotarles las manos, los pies o el estómago, casi sin pensarlo. Y aquí os vamos a explicar por qué esos métodos funcionan tan bien.
La idea es que ciertos puntos en las manos y los pies están ligados a algunos órganos, huesos y sistemas del cuerpo en particular.
Puedes consultar la imagen superior para hacerte una idea general de los distintos puntos de reflexologia, e iremos recorriendo cada uno de ellos en esta guía.
Mientras que estos consejos nunca deberían sustituir la opinión médica de los pediatras, sí que son muy buenos para ayudar y apoyar a la rutina de tu bebé.
1- La cabeza y los dientes
La punta de los pies se corresponden con los dientes y la cabeza de tu bebé. Esto puede ser realmente útil para cuando a tu bebé le están saliendo los dientes.
Aplicando amablemente presión sobre esas pequeñas áreas, podrás calmar a tu bebé cuando esté llorando o tenga un berrinche.
2- Senos paranasales
El centro de los dedos se corresponde con los senos paranasales de tu bebé.
Si el bebé ha estado estornudando sin parar, tiene una nariz que moquea terriblemente, o presenta dificultades para respirar debido a la gran mucosidad, prueba a frotar los dedos de los pies para aliviar los síntomas.
Sin embargo, asegúrate siempre de consultar a su pediatra además de realizar esto.
3- Pulmones
La congestión del pecho en los bebés suele estar provocada por alguna infección o resfriado.
Si no se trata, puede llevar a dificultades con la respiración, a la hora de comer y también de dormir.
Así que, además de seguir los consejos de tu pediatra, prueba a calmar a tu bebé masajeando las «bolas» de sus diminutos pies – el área justo bajo los dedos de sus pies (que puedes ver de color azul en la imagen superior) – que corresponde con sus pulmones.
4- Plexo solar
El plexo solar es una compleja red de nervios situados en el abdomen, detrás del estómago.
A veces, las molestias pueden venir de este área, y el resultado puede ser el malestar de estómago, espasmos, rigidez y dificultad para respirar.
Prueba a aplicar amablemente presión sobre la zona coloreada que puedes ver en la imagen superior para tratar de calmar esas molestias.