Mantener tu casa limpia es mucho más trabajoso de lo que parecía cuando vivías con tus padres, pero no desesperes, que de todo se aprende y con esfuerzo y dedicación conseguirás que tu hogar esté reluciente, pero debes tener cuidado con lo que usas para limpiar.
Muchos son los obsesos de la limpieza que quieren desinfectar cada rincón de la casa, pero no todo vale y si empiezas a mezclar productos de limpieza la cosa puede terminar muy mal.
7 Productos de limpieza que no debes mezclar
1- Alcohol y lejía
Si combinas estos químicos se producirá cloroformo y ácido muriático, produciendo daños en el sistema nervioso, pulmones, hígado, riñones, ojos y piel. El día de limpieza puede terminar en el hospital.
2- Dos tipos de desatascadores
Por muy descabellado que parezca, pasa con más frecuencia de lo que imaginas. Usas un desatascador y si no funciona, corres a por otro. Los ácidos de ambas marcas pueden resultar en una combinación altamente corrosiva y peligrosa para tu salud.
3- Lejía con vinagre
Al agregar un ácido débil, como es el caso del vinagre, a tu lejía, se producen unos gases tóxicos que puede producir quemaduras en tu ojos y daños graves en tus pulmones.
4- Blanqueador de cloro con vinagre
Cualquier tipo de producto con base de cloro es altamente peligroso combinarlo con algo más, especialmente si es de tipo ácido, como el vinagre. Su combinación genera unos vapores tóxicos para quien los inhale.
5- Amoníaco con lejía
Esta mezcla produce unos vapores que pueden causar severos daños en tu sistema respiratorio. También debes tener cuidado con el amoníaco, ya que produce una sustancia altamente tóxica que, en altas concentraciones, puede resultar tóxica.
7- Dos productos de limpieza de marcas diferentes
Si eres de los que piensa que mezclando dos limpiadores los resultados serán mejores, estás muy equivocado, lo único que vas a conseguir es una reacción incontrolada y el resultado es imprevisible.
