El limón es una de las frutas que cuenta con más beneficios del planeta, por no hablar de su sabor y olor únicos, es normal que forme parte de un sin fin de recetas originarias de todas partes del mundo.
A pesar de su elevado contenido en antioxidantes, al tomarnos el zumos perdemos muchos de sus nutrientes y gran parte del potencial medicinal. Afortunadamente, el congelador está de nuestra parte. La cáscara del limón fortalece el sistema inmunológico y contiene muchísimos beneficios para la salud como la regulación del colesterol, la prevención del cáncer, el tratamiento de infecciones bacterianas y la destrucción de parásitos y gusanos.
Estos son los beneficios para la salud de esta fruta milagrosa:
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- Prevención del asma
- Lucha contra la inflamación
- Desintoxicación de los riñones y el hígado
- Fortalecimiento del sistema inmunológico
- Regulación de la presión arterial alta
- Eliminación de bacterias dañinas
- Lucha contra la depresión y el estrés
- Lucha contra el cáncer
A pesar de lo que solemos pensar, en muchas ocasiones la cáscara y pieles de las frutas son igual o más nutritivas que la pulpa.
Hace décadas, científicos investigaron los efectos que tenía el limón sobre el tratamiento del cáncer. Tras los estudios observaron que estas frutas tienden a erradicar las células malignas de varios tipos de cánceres, como el de pulmón, mama y colon. Lo mejor de todo es que los limones sólo atacan a las células cancerosas y no afectan a las sanas.
Según la Dra. Marilyn Glenville, nutricionista y experta en salud, las cáscaras de diversas frutas pueden fortalecer el sistema inmunológico y mejorar la salud en general. También afirma que los batidos son mucho más saludables que los zumos ya se utiliza la fruta por completo para su preparación.
¿Cómo podemos añadir el limón a nuestra dieta diaria?
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El limón es muy versátil, por lo que no resulta nada complicado añadir alguna que otra pieza en nuestra dieta, sea cual sea. Si lo deseas, puedes agregar el zumo de un limón en un vaso de agua y beberlo por las mañanas todos los días, lo que te asegurará una buena dosis de vitamina C; pero si lo que queremos es beneficiarnos de todas las vitaminas y nutrientes que contiene la cáscara, lo mejor será que congelemos el limón por completo.
Una vez congelado, podremos rallar el limón y añadir las virutas de cáscara a cualquier ensalada, sopa, pescado, pollo, arroz, postre, dulce y un largo etcétera. De esta manera también podremos preparar deliciosos batidos y smoothies súper refrescantes.
