Muchas de las personas que adoran a los animales tienden a mostrarles lo mucho que los quieren, ya sea besándolos o dejando que sea él quien lo haga, dándote lengüetazos en boca y mejillas. Sin embargo, deberíamos evitar este gesto ya que podría ser más peligroso de lo que pensamos. Después de leer este articulo, probablemente te lo pienses dos veces la próxima vez que quieras besar en la boca a tu perro.
Neilanjan Nandi, un profesor asistente de la Facultad de Medicina de la Universidad de Drexel, en Filadelfia, ha hecho especial hincapié en un correo electrónico en que el principal problema se encuentra en las bocas de los animales ya que albergan una gran cantidad de bacterias y virus.
Es cierto que su saliva tiene efectos muy beneficiosos ya que contiene proteínas que pueden ayudar a limpiar y curar sus heridas pero los humanos no estamos preparados para combatir todas esas bacterias que salen de sus bocas.
"Hay algunos organismos que solo se encuentran en los perros y que nosotros no estamos hechos para tolerar ni combatir," escribe. En sus bocas hay bacterias zoonóticas, lo que significa que se pueden transmitir a humanos y por lo tanto causar enfermedades. Entre estas bacterias se encuentran la E.Coli, la Salmonela y el Campylobacter, que provocan enfermedades gastrointestinales graves en humanos.
Cuando la saliva de los perros toca la piel humana de una persona sana sin ningún tipo de herida, es muy difícil que cause problemas ya que no existiría apenas absorción a través de la piel.
Sin embargo, si existe una fácil absorción a través de las membranas mucosas de la nariz, la boca y los ojos de una persona. Aunque es difícil que se transmitan enfermedades, es mejor evitar que los perros laman esas partes del rostro para prevenir cualquier tipo de enfermedad.
Igualmente, debes ser consciente de que no se trata solo de la saliva. Los perros ponen su hocico en muchos lugares desagradables y huelen excrementos de otros perros, por lo que terminan llenos de bacterias, gérmenes y virus de todo tipo y podrían transmitirnos infecciones como lombrices intestinales o pequeños gusanos parásitos.
Pero no debes preocuparte en exceso. Si tu mascota lleva las vacunas al día, está desparasitada y no dejas que te lama las zonas más peligrosas que hemos nombrado antes (nariz, boca y ojos), no tienen por qué existir problemas. Puedes seguir mostrándole el amor que sientes por él acariciándolo todo lo que quieras. Recuerda: no lo beses ni dejes que te lama las zonas con mucosas.
