La familia finalmente se da cuenta de la razón desgarradora por la que su perro adoptivo les mira fijamente cada noche

Adaptarse a un nuevo hogar puede ser difícil para los animales procedentes de un refugio. Llegar a un entorno desconocido y tener que interactuar con extraños es a la vez confuso y aterrador para cualquier criatura, especialmente para aquellos que han sufrido circunstancias traumáticas.

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Es comprensible que un animal no se acostumbre a una nueva situación de inmediato. Si tu nueva mascota se está comportando de manera extraña, es probable, que haya una razón para ello.

Esto fue lo que le pasó al protagonista de esta historia que fue recientemente adoptado por esta familia: el perro miraba fijamente a sus nuevos dueños hasta que se dormían cada noche. Sigue leyendo para averiguar el por qué.

Cuando esta familia adoptó a su nueva mascota de un refugio de animales, se adaptó a la familia bastante rápido.

Lo recibieron con afecto y él hizo lo mismo.

Llevaban al perro a pasear y jugaban con él todo el día, pero había un problema: cada noche, cuando la madre y el padre se acostaban, notaron que el perro se sentaba a su lado y los miraba hasta que se quedaban dormidos. Cuando despertaron, él estaba allí, todavía mirando. No entendían el por qué, parecía que no dormía nada...

Pensando que podría estarle pasando algo malo, la familia lo llevó al veterinario. Después de un chequeo, se les informó que estaba perfectamente sano. Aunque se volvieron a casa felices todavía querían respuestas, así que decidieron visitar el refugio donde lo habían adoptado.

Cuando la familia le preguntó al personal del refugio si habían notado el extraño comportamiento nocturno del perro, le comunicaron la desgarradora noticia. El dueño anterior había esperado a que el perro se durmiera una noche y lo llevó al refugio de animales y lo dejó allí para siempre. Cuando despertó, nunca volvió a ver a su dueño...

Tan emocionados por la historia de su perro, la familia se fue a casa e inmediatamente puso la cama del perro junto a la suya para mostrar que él pertenecía a la familia y que podía dormir todo lo que quisiera sin ninguna preocupación en el mundo.