Si fumas o tomas alcohol a diario, quizás quieras dejar que tu bebida se enfríe un poco, especialmente si es té caliente. Una investigación sugiere que existe un enorme vínculo entre el consumo excesivo de tabaco o alcohol y té caliente y el desarrollo de cáncer de esófago.
Lo cierto es que el cáncer de esófago es una forma de cáncer más común de lo que piensas, acabando con la vida de aproximadamente 400.000 personas cada año, según la Agencia Internacional para Investigación del Cáncer. Por otra parte, también se ha descubierto que la enfermedad afecta a más hombres que mujeres.
Desafortunadamente, se estima que la tasa de supervivencia para el cáncer de esófago es solo del 18%, lo que significa que esta investigación podría salvar las vidas de muchas personas que tienen problemas para dejar su mal hábito.
Un estudio chino que siguió a 500.000 adultos durante casi 10 años descubrió que el vínculo entre tener uno de estos malos hábitos y tomar bebidas calientes aumenta significativamente, de 2 a 5 veces, el riesgo de contraer cáncer de esófago.
En un artículo publicado en la CNN, investigaciones previas descubrieron que las bebidas calientes que alcanzan temperaturas de 65ºC podrían provocar cáncer de esófago.
"Irritar el revestimiento del esófago podría provocar un aumento de la inflamación y una renovación más rápida de las células", comentaba Freedman, investigador principal del Instituto Nacional del Cáncer en Maryland.
"Alternativamente, los líquidos calientes pueden afectar a la barrera de las células que recubren el esófago, dejando el tejido susceptible a un mayor daño por otros carcinógenos".
Dicho todo esto, evitar el tabaco y el alcohol es la mejor manera de prevenir el cáncer. Mientras tanto, espera a que se enfríe tu café u opta por el café helado. ¡Compártelo con todos tus amigos y familiares! Fuente: CNN