¿La mera idea verte en mitad de una carretera con tráfico te genera sudores fríos? ¿Sientes ansiedad cuando te pitan sin parar cuando conduces por la carretera? ¿Temes que te arrollen en la ciudad, a salirte de la carretera o a rozar una columna de un parking con le coche?
Entonces es posible que padezcas amaxofobia, es decir, el miedo a conducir llevado hasta un extremo patológico.
Según un estudio realizado por el Instituto Mapfre de Seguridad Vial, un 30% de los conductores españoles tiene miedo a conducir y hasta un 6% confiesa que es incapaz de hacerlo. ¿Eres tú uno de ellos?
¿Te gusta conducir?
Existen muchos detonantes que pueden dar lugar a la amaxofobia, como por ejemplo haber sufrido un accidente automovilístico, haber tenido un percance en la carretera o cualquier otro mal recuerdo relacionado con la conducción.
A partir de entonces, cada vez que te subes a un coche para conducir irrefrenablemente sufres episodios de ansiedad, taquicardias y dolores de barriga originados por el puro miedo. Por no hablar de la sensación de frustración e impotencia que genera sentir tanto temor por algo que a los demás les resulta tan fácil.
Aunque no lo creas, más de un tercio de los conductores sufre ansiedad al volante, en la mayoría de los casos generados por el miedo derivado de la manera de conducir del resto de los usuarios.
¿Por qué afecta en mayor medida a las mujeres?
Según el estudio mencionado de Mapfre, las mujeres tienen el doble de posibilidades de sufrir amaxobia. Suelen ser personas con un alto nivel de estrés, antecedentes de depresión o ansiedad, fragilidad emocional, baja autoestima, reducido nivel de tolerancia a la frustración, gran nivel de autoexigencia y con alta susceptibilidad al miedo.
Según un estudio de 2010 realizado por Attitudes, la ansiedad es el problema más común de los casos. Según el estudio, 1 de cada 4 mujeres afirman sentirse muy ansiosas al volante, mientras que solo 1 de cada 5 hombres afirma experimentar esta sensación.
¿La amaxofobia tiene cura?
Lo primero y más importante es conocer el grado de amaxofobia existente y tratarlo conduciendo gradualmente con la ayuda de profesionales.
La Fundación CEA lleva años organizando cursos terapéuticos gratuitos de conducción para víctimas de accidentes de tráfico que han sufrido ese problema.
Estas sesiones están coordinadas por un equipo de psicólogos y formadores viales especializados en tratamiento de víctimas de tráfico y amaxofobia que ayudan a los participantes a superar su miedo, corregir situaciones de riesgo en carretera y solventar imprevistos al volante.
También existe la posibilidad de ir a una autoescuela especializada en la que ofrezcan terapias personalizadas que combinan el trabajo de un psicólogo con un instructor de formación vial. Según los expertos, el tiempo necesario para sobreponerse a este problema depende de cada persona y del grado de la fobia.
No te acomplejes si te da miedo conducir. El mundo automovilístico no está hecho para todos. ¡Comparte los detalles del extraño miedo a conducir con todos tus amigos!