Hay expresiones que utilizamos tantísimas veces al cabo del día y en nuestra vida diaria, que hasta llegan a convertirse en canciones.
"De cal y arena" es una de las más conocidas pero todavía te encuentras con el que te dice que no sabe cuál es la buena, si la de cal o la de arena. Te lo decimos nosotros.
Destapamos el misterio de la cal y la arena
Mientras lees esto seguramente te esté rebotando en la cabeza la canción De cal y arena de Merche.
Pues continúa con la sintonía porque la artista supo la diferencia que hay entre la una cosa y la otra, y sabe cual de ellas es la buena y cual la mala.
Pero vayamos al origen, ¿por qué se utiliza esta expresión con estas sustancias y no con otras como el agua y la sal, por ejemplo?
No intentes buscar la respuesta en la letra de Merche porque ella se centra en la interpretación que el paso del tiempo ha heredado de este refrán.
La verdad es que viene del mundo de la construcción. Los obreros debían crear una masa esencial para unir ladrillo y mezcla, la argamasa, para las que eran necesarias la cal y la arena.
Las matemáticas nunca han fallado y estaba estudiado que tenían que unir una de cal por otra de arena para conseguir la masa perfecta que utilizarían para levantar muros.
La cal era la parte consistente y la arena la más liviana, pero unidas, formaban la mezcla perfecta. Pero por separado, la cal es mala y la arena no.
Una es peligrosa y tóxica e incluso se utilizó para desinfectar en tiempos de peste; la arena cura, protege y no es perjudicial.
Es por ello que el paso de el tiempo ha tomado prestada esta mezcla de los obreros para interpretar situaciones contrapuestas, como efectivamente cuenta la letra de Merche.
Una de cal y arena es, por ejemplo, besar a alguien y después pegarle; hacer la comida y después no comerla; comprar unos zapatos y después tirarlos; o poner una de cal y tres de arena. ¿Lo has entendido ya?
¿Qué otras expresiones usas a diario pero no sabes el origen? ¡Compártelo con todos tus amigos y familiares por redes!