El curioso origen del Hielo en las bebidas con la que una empresa llegó a quebrar por culpa de un evidente error

El curioso origen del Hielo en las bebidas con la que una empresa llegó a quebrar por culpa de un evidente error

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El curioso origen del Hielo en las bebidas con la que una empresa llegó a quebrar por culpa de un evidente error banner
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En el sofocante verano de 1844, la Wenham Lake Ice Company abrió su primera sucursal en Londres. Colocaron en su escaparate un enorme bloque de de hielo y, a la mañana siguiente, instalaron otro. Los viandantes se quedaban mirando anonadados. Todos se preguntaban cómo era posible que el agua estuviese ahí congelada.

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Al día siguiente repitieron el proceso y comenzaron a entrar clientes acalorados y sudando pidiendo el producto. En Londres no estaban acostumbrados a sentir tanto calor, por lo tanto los ciudadanos se volvieron locos con este nuevo invento.

wikimedia

La tienda ponía cada día un periódico debajo del bloque de hielo para que los transeúntes pudiesen comprobar que era totalmente transparente y que incluso se podía leer a través de él.

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En cualquier cena de la alta sociedad estaba presente el hielo de la marca Wenham. Su calidad y pureza eran muy valoradas. De hecho, incluso la Reina Victoria insistía en que la única marca que utilizarían en el Palacio de Buckingham sería Wenham.

La Wenham Lake Ice Company se llamaba así por la zona donde se crearon estos famosos bloques de hielo, el lago Wenham, en Massachusetts. Los bloques eran trasladados por el Océano Atlántico.

Paula Stephens / Shutterstock

La idea de importarlo se le ocurrió a Frederick Tudor en el año 1805. De hecho, fue cuando tenía 20 años mientras viajaba por el Caribe con un calor insoportable. Cuando consiguieron obtener el sello real de aprobación, comenzó a pensar cómo podría exportarlo a otros países.

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En noviembre de 1805, llenó la bodega de un barco con hielo del lago del lago Wenham y lo envió a Martinica. Sin embargo, no encontró compradores. Un error que le salió caro, puesto que casi todo el hielo se derritió y Tudor sufrió grandes pérdidas.

Por suerte, el coste del hielo era muy barato, se producía de forma gratuita gracias a las bajas temperaturas y se podía aislar del calor usando el serrín sobrante de los aserraderos. Por lo tanto, cuatro años más tarde, Tudor decidió volver a probar suerte y, al fin, consiguió grandes beneficios enviando hielo a todo el mundo.

Décadas después, el hielo se convirtió en la segunda mayor exportación en peso de América, aunque solo dos tercios del cargamento sobrevivían al viaje de 130 días de Boston a Bombay.

Elena Veselova / Shutterstock

Por desgracia, la gente comenzó a darse cuenta de que el hielo del lago Wenham no tenía ninguna diferencia con el hielo de cualquier otra marca. El agua helada era simplemente agua helada. Por lo tanto, surgieron muchas empresas que comenzaron a exportar hielo, la producción aumentó y el dominio norteamericano acabó.

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¿Te imaginabas que el uso del hielo en las bebidas fue de esta forma? ¡Cuéntanoslo en los comentarios! ¡Comparte este interesante artículo con todos tus amigos! Fuente: Historias Breves de Objetos Cotidianos, Andy Warner

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