A la mayoría de nosotros nos gustan las gominolas, esos pequeños ositos de colores o corazoncitos que a todos nos endulzan un día amargo y que nos recuerdan que seguimos siendo niños. Pero también nos encantan esas copas de vino con los amigos después del trabajo o durante una noche en un bar recordándonos buenos momentos.
Pero, ¿qué pasaría si mezclamos las dos cosas? Hoy te traemos como hacer nuestras propias gominolas con sabor a vino para endulzarte el día mientras vives momentos increíbles.
¡Te sorprenderá lo fácil que es hacerlo! Con solo cuatro ingredientes, puedes crear un montón de ellos en cualquier momento. Puedes usar cualquier tipo de molde de silicona que te guste para crear estas gominolas perfectamente texturizadas con sabor a vino. Estos alegres dulces son el acompañamiento perfecto para una noche de chicas, una cita nocturna o esa reunión larguísima en la oficina un viernes por la tarde.
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Así que, ¡adelante! Vamos a intentar hacer estas riquísimas gominolas. Los ingredientes que necesitas son:
- Un vaso (250 ml) de vino.
- 4 cucharadas de gelatina.
- 1/2 cucharadita de stevia (opcional)
- 2-4 cucharaditas de sirope de arce.
Coge una cacerola, ponla al fuego y vierte el vino. Caliéntalo a fuego lento y añade la gelatina.
Deberás añadirla poco a poco. Agrega dos cucharadas y remuevelas antes de añadir las siguientes dos cucharadas para completar las cuatro necesarias.
Después de disolver completamente la gelatina, añade stevia y sirope de arce hasta que esté lo suficientemente dulce para su gusto.
Con mucho cuidado, rellena los moldes de silicona con la mezcla.
Coloca todo en la nevera durante 2-3 para que se enfríe y se cuaje.
¡Y listo! Tendrás tus gominolas de vino listas para probarlas.
Aquí te dejamos el vídeo para que veas el proceso con más detalle.
¿Te han salido buenas?
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