No son pocos los hijos adultos e independientes que se ven en la obligación de volver a su casa con los padres. Algunos lo aceptan con deportividad, otros con profunda tristeza y otros con sentido del humor.
Sea del tipo de hijo que seas, esta historia donde padres e hijos se ven en la obligación de vivir bajo el mismo techo, tiempo después de haber vivir separados, te dejará sin palabras.
El padre, la madre, el marido y el yerno
Una madre subió las escaleras de su casa al oír un extraño ruido en la habitación de su hija. No pensaba encontrar nada, probablemente fuera el ruido de una habitación habitada de nuevo, algo a lo que ya no estaba acostumbrada.
Abrió la puerta y echó un vistazo para encontrarse a su hija, desnuda sobre la cama, usando un vibrador. La madre no podía estar más sorprendida y avergonzada.
"Hija mía, ¿qué estás haciendo?"
"Mamá, ya tengo 30 años y sigo viviendo con mis padres. Es demasiado tarde. El barco zarpó hace ya mucho tiempo, esto es el único marido que voy a tener".
Pocos días después, el padre escuchó el mismo ruido y como su mujer no le había contando nada, fue a investigar. Abrió la puerta del dormitorio de su hija y la situación era igual. Ella le gritó:
"¡Fuera! Esto es lo más cerca que voy a estar nunca de tener marido"
La semana siguiente, la madre escuchó el zumbido de nuevo, pero esta vez en el salón. No podía creer lo que estaba pasando, así que fue corriendo a descubrir qué es lo que estaba pasando. Al entrar en el salón, no podía creer lo que encontró.
Su marido estaba sentado en el sofá al lado del vibrador viendo la televisión. "¿Pero qué estás haciendo?" Le preguntó ella. Su marido, con total tranquilidad, le respondió.
"¿No puedo un hombre ver el partido con su yerno en paz?"
Puede que esta familia se haya tenido que reunir por situaciones que no son las mejores, pero desde luego su sentido del humor les llevará lejos.
¿Le presentaría a tus padres a tu futuro marido? ¿Te has independizado o sigues viviendo con ellos? ¡Compártelo con tus padres y amigos para que sepan a lo que atenerse! Fuente: hefty