Hoy en día la seguridad de nuestras pertenencias se ha convertido en una mezcla de alta tecnología y elementos de la vieja escuela.
En este segundo grupo se encuentran los candados de toda la vida que a día de hoy seguimos usando para cosas tan cotidianas como la taquilla del gimnasio o, el más usado, asegurar la bici en la calle.
Pero, ¿qué pasa cuando pierdes las llaves? Y bien sabes que las vas a perder porque no sería ni la primera vez ni la última que te tienes que volver a casa sin ducharte porque no has encontrado la llave de la taquilla.
Hoy te explicamos cómo abrir un candado sin la llave.
Es muy fácil si tienes las herramientas necesarias.
Solo vas a necesitar dos llaves inglesas pequeñas, si hablamos de un candado de tamaño estándar, y un poquito más grandes si es ya un señor candado.
El método es bastante sencillo, aterradoramente sencillo, porque seguro que tu intención es pura y solo quieres recuperar tus pertenencias, pero, ¿qué sentido tiene un candado si es tan fácil de romper?
Coloca las llaves inglesas tal y como se ve en la imagen y junta sus extremos opuestas haciendo fuerza para que el candado se rompa.
Mira con qué facilidad se rompe el candado al aplicar fuerza con las dos llaves inglesas.
Puedes estar tranquilo cuando estés en el gimnasio, ya que sería demasiado descarado ponerse a abrir un candado con dos llaves inglesas; pero si sueles usar este tipo de candados para que tu bici pase la noche segura atada a un poste de la luz, quizás quieras cambiarlos por uno como el de la fotografía, que son mucho más difíciles de romper.
La próxima vez que pierdas las llaves ya no tendrás que preocuparte por nada, con tan solo dos llaves inglesas podrás recuperar tus cosas.
Comparte este increíble truco con tus conocidos más dramáticos. Fuente: tiphero Imagen de portada: TricksHacks